CiU cree que la oferta de Aznar sólo persigue quitarle votos

Convergència i Unió (CiU) está aliada con el PP en el Parlament, pero cree que la oferta de José María Aznar para que los nacionalistas catalanes entren en el Gobierno español no es el gesto amistoso que parece. Al revés, cree que lo que realmente pretende es restarles votos, aparentar una cercanía e incluso identidad entre ambas fuerzas que CiU no desea. Además, para que la participación de CiU en el Gobierno de Aznar fuera posible, debería cambiar de política. Así lo afirmó ayer el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, el día después que el presidente de CiU y del Gobierno catalán, Jordi Pujol, rechazara la oferta Ayer se supo que Aznar ofreció a Pujol cuatro carteras, incluida una vicepresidencia.

La suculenta oferta de ministerios hecha por Aznar a CiU incluía la posibilidad de que los nacionalistas catalanes controlaran carteras de peso como las de Economía o Interior, según informó ayer La Vanguardia. Pujol declinó ayer realizar declaraciones sobre el ofrecimiento, tras conocerse estos detalles de la sustanciosa oferta política planteada por Aznar para entrar en el Ejecutivo. Pujol se negó a tratar este asunto en su comparecencia pública de ayer, en un homenaje al fallecido dirigente socialista catalán Josep Pallach, celebrado en Palafrugell, informa Guillem Martínez.

Duran, en cambio, aseguró que no cree que el líder del PP esté renunciando a dejar a su propio partido sin espacio político en Cataluña, sino todo lo contrario. 'Lo que Aznar pretende es intentar reducir el espacio electoral de CiU en beneficio propio, estrategia que obviamente considero legítima y que consiste en hacer ver que CiU se niega a gobernar en Madrid y, por tanto, que CiU renuncia a los activos y atractivos electorales que eso supone ante parte de nuestro electorado', declaró a Efe. Pero si ésta es a su juicio la pretensión de Aznar, 'CiU no tiene que responder si quiere estar o no en el Gobierno', agregó, sino interpelar al PP sobre 'qué es lo que pretende hacer desde el Gobierno'.

Para Duran Lleida, las invitaciones a participar en un Gobierno 'no se formulan como una simple demanda de adhesión, sino que consisten en discutir un programa de acción de gobierno'. Y en este caso, 'paralelamente a la invitación a formar parte del Gobierno, están los hechos'. Los hechos son, según Duran, que el PP ha de explicar si, con cuatro miembros de CiU en el Gobierno, como dice que está dispuesto a incluir, está también dispuesto a modificar su política de peajes en Cataluña, por ejemplo. O si está dispuesto a que el aeropuerto de Barcelona tenga autonomía y pueda ser sede de vuelos internacionales. O si con la presencia de ministros de CiU está dispuesto a utilizar la previsión constitucional del artículo 150.2 y hacer de la Generalitat una Administración única en Cataluña; si está dispuesto a potenciar la Feria de Barcelona como lo ha hecho con la de Madrid o el Eje Mediterráneo en general, y si está o no dispuesto a permitir la presencia de Cataluña en las instituciones europeas.

Para el secretario general de CiU, 'esto es lo auténticamente importante, y no tener o no ministros, porque en este caso las palabras van por un lado y los hechos de la acción de gobierno por otro'.

Homs matiza

Mucho menos contundente fue la apreciación realizada por uno de los más importantes miembros del Gobierno catalán, el consejero de Economía y Finanzas, Francesc Homs. El consejero criticó la oferta de Aznar, pero se mostró abierto a ella con vistas al futuro.

'Lo importante es saber qué política se tiene que desarrollar en el Estado español y esto es lo que tiene que decir el presidente del Gobierno'. Pero luego agregó que la respuesta negativa dada por Pujol a Aznar 'no significa que este planteamiento no sea asumible en otras circunstancias'.

Homs perteneció antaño al actualmente desarticulado sector roquista de Convergència, que se caracterizó por tener ideas distintas a las de Pujol en algunos asuntos, entre los que destacaba, precisamente, el de la participación o no de CiU en el Gobierno de España. Siendo Miquel Roca el portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, los nacionalistas recibieron ofertas para entrar en el Gobierno central, tanto en la etapa de UCD como en la del PSOE.