Patrimonio exige que se prohíba edificar a menos de 30 metros de la valla del monte de El Pardo

Patrimonio Nacional ha denunciado ante la Fiscalía de Madrid que las nuevas urbanizaciones autorizadas por el Ayuntamiento en los aledaños del monte de El Pardo ponen en peligro la seguridad del palacio de la Zarzuela, residencia de los Reyes. Según Patrimonio, los niveles de seguridad 'se han deteriorado a lo largo de 60 metros lineales de la tapia perimetral' que protegen el recinto. Patrimonio señaló ayer que ha convocado una reunión con los nueve ayuntamientos de la zona y la Comunidad para evitar nuevas construcciones en un perímetro de 30 metros del monte.

Los servicios de seguridad de La Zarzuela advirtieron el pasado otoño a los responsables de Patrimonio Nacional de que las obras de una parte del nuevo barrio de Valdemarín, que se levanta junto a un extenso tramo de la histórica tapia del monte de El Pardo, menoscababan la privacidad de la zona en la que está la residencia de la Familia Real. Un portavoz de la Casa del Rey confirmó ayer que se había producido la citada advertencia a Patrimonio.

Los encargados de la seguridad del Palacio de La Zarzuela dieron la voz de alarma cuando comprobaron que en esa zona se estaban levantando calles y aceras a cuatro metros de altura sobre el suelo antes existentes, tapando así gran parte de la base de la tapia que rodea el monte de El Pardo. Desde las aceras de las nuevas casas se puede ver sin ninguna dificultad el interior de la zona en la que se erigen las instalaciones del palacio.

Técnicos de Patrimonio Nacional, el organismo estatal propietario de los terrenos sobre los que se levanta el Palacio de la Zarzuela, se desplazaron inmediatamente al lugar y comprobaron que, ciertamente, se estaban ejecutando en esa zona 'una serie de nuevas urbanizaciones residenciales que implican modificaciones topográficas considerables'.

Hasta tal punto de que, según un informe elaborado al respecto por este organismo, una parte de la tapia del monte de El Pardo ha perdido su cometido 'de cerramiento de parcela del monte' para convertirse 'en un muro de contención de tierras, con transmisión de cargas de acera y calzada de vehículos, y con 'la consiguiente situación de inestabilidad estructural'.

Un portavoz de Patrimonio Nacional señaló ayer su preocupación por los nuevos barrios que se están levantando en las proximidades del monte de El Pardo. 'Esta zona cuenta con un plan de protección, pero sólo de puertas para adentro, ya que en su día', explicó, 'no se fijó una zona de afección en el perímetro que limita la zona exterior que habría impedido la construcciones de estas casas'.

Parcelas con licencia

Una de las urbanizaciones del nuevo barrio de Valdemarín que más impacto negativo ha causado en la histórica tapia es, según Patrimonio, la denominada Parquesol, que promueve la firma Punto Inmobiliaria, ubicada en Aravaca. Fernando del Portillo, asesor jurídico de esta inmobiliaria, explicó ayer: 'Nosotros no hemos hecho la urbanización. Hemos actuado sobre parcelas con licencia municipal plenamente consolidada y tras la oportuna tramitación urbanística'.

Del Portillo añadió que, en todo caso, la urbanización de la zona no la ha efectuado su empresa. 'Compramos parcelas urbanas, ya consolidadas', subrayó. Esta inmobiliaria está a punto de acabar 48 viviendas de lujo de tres alturas.

'Las casas están construidas sobre un talud artificial que eleva los edificios entre dos y cuatro metros sobre el terreno original, de tal manera que los pisos bajos también puedan contar con una vista sobre el monte de El Pardo', señala el portavoz de Patrimonio. 'Además de dejar al descubierto el palacio, parece que se puede estar cometiendo un delito ecológico porque se están modificando los cauces de los ríos que pasan por esta zona'.

Patrimonio Nacional ha elevado una denuncia a la Fiscalía de Madrid para que depure posibles responsabilidades, y al Ayuntamiento de la capital, que es quien aprobó el proyecto de urbanización de Valdemarín.

Patrimonio se queja en su informe, fechado el pasado 30 de octubre, de que, pese a ser 'propietario colindante' de las nuevas urbanizaciones, el Ayuntamiento de Madrid no le 'notificó los proyectos de urbanización de dicha zona para cotejar la documentación'. Si lo hubiese hecho así el Ayuntamiento, Patrimonio, como vecino colindante, habría 'analizado la documentación' y presentado alegaciones contra los proyectos urbanísticos diseñados en la zona dentro 'del plazo de exposición pública' y con anterioridad' a ser éstos 'autorizados' por el Consistorio.

Los técnicos de Patrimonio Nacional, tras su visita al recinto a finales del pasado año, llegaron al convencimiento de que era preciso elevar la altura de la tapia que rodea esa zona del monte de El Pardo, 'con el fin de recuperar los niveles de seguridad de la misma'. Y así se hizo con carácter de urgencia antes de Navidad, para preservar la menoscabada seguridad de La Zarzuela.

Las obras de recrecimiento de la tapia se encargaron a 'una constructora con experiencia en obras de semejante dificultad técnica'. Pese a esta reparación de urgencia, el informe de Patrimonio advierte de que las nuevas urbanizaciones han alterado, no obstante, 'las servidumbres de vistas' del Palacio de la Zarzuela. Este hecho, según los técnicos, se traduce 'en una pérdida de la privacidad' del recinto, pues al bajar el nivel de la tapia se ha reducido la seguridad 'contra los intrusos' de un 'recinto tan especial como el monte de El Pardo, que está dentro de la influencia del Palacio de la Zarzuela'.

Patrimonio se muestra muy crítico, además, 'con la absoluta falta de sensibilidad ante una actuación urbanística en las proximidades' del monte de El Pardo', con modificaciones 'hasta en la propia tapia histórica'.

Protección a la zona

Para proteger en lo sucesivo esta zona, Patrimonio apuesta por medidas legales. Entre ellas, introducir una ley de acompañamiento al plan de protección medioambiental del monte de El Pardo que imponga una separación mínima de 30 metros entre la tapia y cualquier actuación urbanística. A tal fin convocará a los ayuntamientos de Hoyo de Manzanares, Colmenar Viejo, Tres Cantos, Torrelodones, Alcobendas, Pozuelo de Alarcón, Majadahonda, Las Rozas y Madrid.

Patrimonio también sugiere la posibilidad de catalogar la tapia como bien de interés de la Comunidad de Madrid, con vistas a defenderla 'de intereses especulativos' que atenten 'contra los valores históricos y medioambientales de este espacio natural'.

Estas medidas habría que adoptarlas, según el informe, 'con independencia de las acciones legales que pueda decidir la abogacía del Estado' de Patrimonio Nacional respecto a los daños ya ocasionados.