Policías contra pintadas callejeras

La ciudad de Orihuela ha entrado en el año 2002 cubierta de pintadas callejeras que con sencillas firmas o garabatos cubren fachadas de comercios y edificios de viviendas, papeleras, bancos y otros elementos del mobiliario urbano. Sólo los monumentos nacionales, tan profusos en la capital de la Vega Baja, se han librado de esta fiebre. Para buscar soluciones al problema se han celebrado reuniones de comerciantes, que exigen mano dura ante la gran cantidad de pintadas. De poco sirvió que un joven fuera puesto a disposición de la Fiscalía de Menores tras ser sorprendido en plena faena; en las últimas semanas se ha producido una segunda racha de pintadas.

Ahora la Policía Local tiene órdenes de afrontar con contundencia el problema. Orihuela contará con una brigada policial para evitar que los chavales recreen su arte en la calle. Parejas de agentes de paisano se ocuparán en distintos turnos de esa labor, anunció el alcalde, el popular José Manuel Medina. Quienes a partir de ahora sean sorprendidos pintando fachadas o mobiliario urbano tendrán que enfrentarse a un juez y al pago de los daños causados. Curiosamente, este fin de semana la sede de la Policía Local en el barrio del Rabaloche fue víctima de varias pintadas.

'Les tendrían que dar una fregona y un pozal y que limpien todo lo que manchan, así comprenderían el daño que están haciendo', comentó Mariano Torres, miembro de la directiva de la Asociación de Comerciantes del Casco Histórico de Orihuela (ACCCO) y víctima de las pintadas. En su caso, como le ocurre a otros comerciantes, sus fachadas son de mármol, un material cuya limpieza es muy difícil y costosa; aunque se limpie la pintura, queda su marca y es necesario pulir el mármol para devolverle su aspecto natural. Además de costar un dinero, ni siquiera es fácil encontrar profesionales para hacerlo; 'para los marmolistas, estas limpiezas son pequeñas chapuzas y cuesta encontrar empresas que vengan a hacerlo'. lamenta.

El presidente de la Asociación de Comerciantes del Municipio de Orihuela (ACMO), Antonio Cabrera, cree que 'debe haber medidas urgentes para cortar esto como sea, porque además del deterioro de la ciudad hay importantes perjuicios económicos'.

La Policía Local tiene localizados a unos 200 jóvenes menores de edad que en los últimos años han sido sorprendidos realizando pintadas, explicó el concejal de Seguridad Ciudadana, Miguel Mazón. Hasta ahora no se ha empleado mucha contundencia con los sorprendidos, pero se les va a convocar a una reunión, a los jóvenes con sus padres, para advertirles de la nueva situación. Mazón señaló que algunos lugares públicos han tenido que repintarse ya cuatro veces y que los comercios con mármol o pintura veneciana en sus fachadas están corriendo con importantes gastos para eliminar las pintadas. Explicó que pintadas y murales sólo pueden realizarse con la autorización escrita del propietario. De hecho la ciudad cuenta con verdaderas obras de arte en muros y paredes.

Orihuela no tiene medios para lavar la fea imagen del río putrefacto que la surca, pero sí, al menos, para mantener limpias sus calles y plazas.