El 'lehendakari' prepara medidas excepcionales contra la prórroga del Concierto vasco

Con la entrada en vigor ayer de la prórroga del sistema de financiación vasco, el denominado Concierto Económico, el año empieza como acabó: con uno de los exponentes de la autonomía convertido en símbolo del radical desacuerdo entre los Gobiernos central y autonómico. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, anunciará hoy las medidas económicas, jurídicas, y también políticas y sociales, que su Gabinete decidió el lunes para hacer frente a la prórroga del Concierto, decretada por el Gobierno central ante la falta de acuerdo. 'El Concierto ha quedado sin vigencia', dijo el portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Jon Imaz.

Imaz definió el Concierto Económico como 'la piedra angular del autogobierno' vasco. 'Sólo quedan medidas unilaterales', señaló en referencia a la prórroga que el Ejecutivo de Ibarretxe no acepta, 'que van contra el propio espíritu del Concierto'. Faltaban diez horas para que la ley que lo prorroga, y que esa mañana publicó el BOE, entrara en vigor. Y sólo unos minutos para que el Gobierno se reuniera, la misma tarde de Nochevieja, en un consejo extraordinario que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, convocó sobre la marcha, tras no recibir respuesta a la última propuesta del Ejecutivo autónomo, para adoptar medidas 'contundentes y duras', según fuentes del propio Ejecutivo..

La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, realizó el domingo una última oferta para firmar el acuerdo: aparcar el escollo de la representación vasca en los Consejos de Ministros europeos para temas fiscales y acordarla en el plazo de seis meses en la Comisión mixta de Cupo. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no aceptó esta alternativa.

El portavoz del Gobierno de Vitoria, Josu Jon Imaz, adelantó la adopción de 'medidas jurídicas, políticas, económicas y sociales' para responder a una situación que Imaz calificó de 'especialmente grave'. La nueva negativa, dijo, 'deja absolutamente visible cuál era la voluntad del Gobierno español en toda esta negociación: no alcanzar un acuerdo e imposibilitar que el Concierto pudiese tener una solución acordada'. A su juicio, 'el PP y el Gobierno de Aznar han dado un rotundo portazo a la sociedad vasca y a los agentes económicos y sociales' de Euskadi, que, según dijo, respaldan la propuesta del Gobierno autónomo. Fuentes de ese Ejecutivo no descartan el recurso a la movilización en la calle.

Engaños y mentiras

En la misma línea, la vicelehendakari, en una comparecencia en mitad del pleno que debatía los Presupuestos en el Parlamento vasco, dijo que el Gobierno central tenía adoptada 'desde hace tiempo' una estrategia 'de no negociación, sino de imposición, cuyo mayor exponente fue la prórroga unilateral'. 'Mientras hacíamos esfuerzos para el acuerdo, el Gobierno nos ha estado engañando y mintiendo a lo largo de todo el proceso negociador', acusó.

Montoro se ratificó en lo inaceptable de la propuesta vasca. El ministro se declaró a la espera de nuevas propuestas, nunca basadas en la participación directa del País Vasco en los órganos de la Unión Europea. 'No cabe en la Constitución, ni en el Estado de las autonomías, ni es propio ni adecuado en la UE', dijo. Montoro sostiene que el Ejecutivo vasco no puede negarse a aceptar la prórroga.

IU, el socio minoritario del Gobierno vasco, pidió ayer la reunión urgente de la diputación permanente del Congreso para que el Ejecutivo explique 'sin dilación' la falta de acuerdo y su intención de abrir negociaciones con las diputaciones forales, 'un auténtico despropósito sin validez jurídica', según el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares. 'El Gobierno del PP no ha encajado su derrota en las elecciones vascas y sigue buscando la confrontación y el deterioro institucional', declaró.