_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Mal empleado

Creo que todos los madrileños que pagamos impuestos somos empresarios ya que pagamos buenos sueldos a los que, para bien y para mal, fueron elegidos en las urnas. Por tanto, éstos son nuestros empleados, y como tales, nos deben rendir cuentas. En cualquier empresa, un mal empleado tiene los días, las horas o los minutos contados. Y éste es el caso de Álvarez del Manzano, pues ha conseguido llevar a la empresa (Madrid) a la más absoluta ruina, al paroxismo, a la quiebra; la ha convertido en su feudo caciquil, en una jungla, una selva donde todo vale; una ciudad insufrible, invivible, sucia, fea y ruidosa.

Y todo ello gracias a su ineficacia: el tráfico se ha convertido en un cáncer generado por su falta de gestión y rigor, gracias al abandono del transporte público (carril-bus). Y también gracias a su apatía: ha reconocido tras 10 años al frente del Ayuntamiento, que éste no tenía ningún control sobre las obras de la ciudad.

La doble y triple fila de aparcamiento, así como el estacionamiento sobre las aceras o pasos de peatones es ya un mal endémico. El 1 de noviembre de 2001 había un vehículo aparcado a la salida del aparcamiento de residentes de la plaza del Campillo del Mundo Nuevo. Más de 400 vehículos atrapados sin salida en unas instalaciones del Ayuntamiento, pues, según el 091, hasta las 7.30 no hay servicio de grúa municipal.

Demostrada es la falta de respeto y sensibilidad con la que descalifica a las personas que disienten de él, como en la reciente cacerolada recibida en la inauguración del aparcamiento de residentes de Lavapiés.

Es bochornoso contemplar a los agentes municipales los días de partidos de fútbol, sea cual sea el estadio, colocando vehículos en donde debían retirarlos.

Se declara orgulloso de tener en Madrid el carril-bici más largo de España (el circuito Otero de la Casa de Campo no es un carril-bici). Presume de coger a menudo el transporte público, cuando las cámaras de Telemadrid le pillaron in fraganti el pasado 22 de septiembre de 2001 (Día Europeo sin Coches) sin saber qué autobús tenía que coger para ir a su ¿trabajo?

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

'En Madrid no hay atascos (esa palabra tan fea la han inventado ustedes, los periodistas), hay un tráfico más o menos fluido'. 'Las decisiones sobre el cierre de la Casa de Campo al tráfico las tomo yo' (desautorizando a su concejal de Movilidad Urbana, Sigfrido Herráez). 'Sería injusto que la subida del transporte público no la pagaran los usuarios del mismo' (justificando el aumento de casi un 10% previsto para enero de 2002).

Si cada pueblo tiene el gobierno que se merece, me gustaría saber qué tipo de espantosas atrocidades hemos cometido los que vivimos en Madrid para tener que soportar durante más de diez años a semejante personaje.

Después de todo, y parafraseando a su líder Aznar, yo no quiero que se vaya, señor Manzano. Como parte de la empresa que le paga a usted su considerable sueldo, quiero hacer un llamamiento al resto de los empresarios-habitantes de Madrid para despedir, de una vez por todas, a este siniestro y díscolo empleado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_