Los internautas debaten si Yasir Arafat es indispensable para el proceso de paz

¿Quién sucederá a Yasir Arafat? La pregunta la lanzaba la semana pasada el diario británico The Times. Mientras tanto, el primer ministro israelí Ariel Sharon afirmaba que los días de Arafat al frente de los palestinos estaban contados.

El Gobierno de Sharon ha declarado a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) como 'entidad que apoya el terrorismo'. El líder palestino, de 72 años, ha acusado al ministro israelí de querer que fracase su plan contra el terrorismo.

Mientras se reduce el margen de maniobra de Arafat, los foros en Internet reproducen opiniones enfrentadas sobre la figura del presidente de la ANP en el proceso de paz en Oriente Próximo.

Muchos se oponen a las tesis radicales de Sharon. Es el caso de José Antonio, que escribe en un foro de noticias español. 'Arafat es una pieza necesaria en el conflicto, debido a su liderazgo dentro de la comunidad palestina, acaso mermada por la radicalidad de Hamás y la Yihad, y su moderación, o realismo, en su relación con Israel'.

Otras posturas se encuentran en el debate de la Aurora Digital, un sitio de noticias sobre Israel: 'Arafat ya no puede engañar a nadie por más tiempo... O cesa la Intifada y lucha contra el terrorismo de verdad o será considerado como protector de terroristas'. El 86% de los encuestados en esta web considera que ha dejado de ser un interlocutor válido.

Y después de Arafat, ¿qué?La pregunta se repite en uno de los foros sobre Palestina. 'Supongo que la misma cuestión sirve para Sharon, un hombre reclamado por un tribunal europeo [supervivientes palestinos de la matanza de Sabra y Chatila (1982) presentaron en noviembre una demanda contra Ariel Sharon en un tribunal belga por crímenes de guerra]. Creo que si no existiera la cobertura televisiva, definitivamente Sharon ordenaría el exterminio de los palestinos', asegura otro internauta.

Entre los posibles nombres que se barajan para una supuesta sustitución del líder palestino se encuentran algunos de los jefes de los servicios de inteligencia palestinos, así como altos cargos de la ANP.

Una de las opiniones que se repiten es la que augura que la ausencia de Arafat sólo radicalizaría el conflicto. También se discute sobre el papel de Estados Unidos. Bush, presionó a Arafat para que detenga a los grupos palestinos extremistas y, sobre todo, se refirió a la respuesta militar a los atentados en Jerusalén y Haifa: 'Israel tiene derecho a defenderse'.

En todo este mar de violencia, física o verbal, no faltan islas de esperanza en Internet: 'Los fundamentalismos islámicos y judíos no llevan a nada. El ver el mundo desde una sola óptica rompe la tolerancia y sin tolerancia no hay creatividad, sin esto último no puede haber progreso. Lamentablemente ni Sharon ni Hamás aprenden de la historia, usan el terror como arma política. Pacifistas, palestinos y judíos, deben trabajar para aislar a los extremistas de ambos bandos'.