El iconoclasta Albert Pla reaparece junto a Estopa, Rosario y Rosana
El iconoclasta Albert Pla, fiel a su estilo transgresor, reaparece en Madrid, una ciudad que le echaba de menos, justo en los mismos días de tan importantes actuaciones como las de Rosana, Rosario o Estopa. El cantautor catalán coincide, además, con un fiel discípulo suyo, Riki López; con otro desvergonzado, Pablo Carbonell, y con una semana que la Fundación Autor dedica a artistas como Ruibal, Bidinte, Seydu, Marc Parrot, Las Hijas del Sol o Quique González.
Cuando ya faltan pocos días para Navidad, una de las épocas del año en que más discos se compran, tres artistas nacionales de peso se presentan en Madrid con sus nuevos trabajos bajo el brazo: Rosana, Rosario y Estopa. Los tres compiten por llevarse el gato al agua en ventas, siempre que la piratería no acabe con sus esperanzas.
La canaria Rosana presenta un compendio de canciones que a ella le salen del alma con facilidad. Entre boleros, medios tiempos, baladas e incluso un twist-rumba, habla de amor con mejor tino que en su anterior trabajo. Por su parte, Rosario regresa, con Muchas flores, a la rumbita y el flamenquito, estilos que, aunque menores, domina mejor que el rock que quiso probar en otros discos.
Los que siguen fieles a su estilo raca-raca, como ellos mismos lo definen, son los hermanos Muñoz, que con Estopa han protagonizado uno de los fenómenos sociales más peculiares de los últimos años. Destrangis, su segundo disco, tiene los mismos visos de repetir el descomunal éxito de su debú.
El polifacético Pablo Carbonell se muestra en su versión de cantante tan corrosivo como en su papel de reportero. Su primer disco en solitario, Aceitunas y estrellas, lo descubre como un cantautor que hace del humor un asunto serio. Algo parecido al mallorquín Riki López, que con su disco estrena la división discográfica de los radiofónicos Gomaespuma. Aunque la palma en acidez y corrosión se la lleva Albert Pla, que actuará dos noches en Madrid. Inactivo discográficamente desde hace tiempo, su reaparición es una caja de sorpresas donde todo puede ocurrir.
Olga Román es delicadeza pura cantando, como ha demostrado acompañando a artistas como Aute o Joaquín Sabina. Por fin debuta en solitario con Vueltas y vueltas, un disco que presenta hoy y en el que mezcla ecos brasileños con sugerente canción de autor.
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