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El Síndic investiga supuestas anomalías en la atención de menores por parte de la Generalitat

Bernardo del Rosal abre de oficio tres quejas ante la acumulación de denuncias

Las presuntas anomalías detectadas en la actuación de la Consejería de Bienestar Social en materia de menores han motivado la intervención de oficio del Síndic de Greuges, Bernardo del Rosal. El Síndic ha abierto tres investigaciones después de recibir varias quejas relativas, en primer lugar, al posible 'abandono' por parte de Bienestar Social de los menores acogidos en familias; en segundo, en referencia a los chavales extranjeros, y, por último, ante una supuesta aplicación 'indebida' de la Ley del Menor. La Sindicatura no descarta incoar otras quejas en función de las investigaciones.

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Las numerosas denuncias efectuadas en los últimos meses por sindicatos, trabajadores sociales, familias con niños acogidos e, incluso, la reciente mediación de la Fiscalía de Menores de Alicante ante Bienestar Social para que subsane ciertas deficiencias, han destapado supuestas irregularidades en la guarda de menores desamparados por parte del departamento que dirige Rafael Blasco.

Ante esta situación, el síndic Bernardo del Rosal decidió abrir de oficio una queja genérica para investigar el alcance de las anomalías. Según fuentes de la institución, tras una primera lectura la Sindicatura detectó supuestos incumplimientos de la Administración autonómica en parcelas muy distintas referidas a menores. Esta circunstancia llevó finalmente a la Sindicatura de Agravios a incoar tres quejas de oficio diferentes.

En el primer expedientes se investiga el supuesto 'descontrol y abandono' por parte de la Administración de los menores en régimen de acogida, así como el impago de las prestaciones económicas por parte del Consell. 'Hemos detectado ausencia de controles, y debemos clarificar si se trata de hechos puntuales o de un hecho generalizado', señalaron.

El vicepresidente de la Asociación de Voluntarios de Acogimiento Familiar (AVAF) en Alicante, David Manzanas, corroboró ayer que las familias acogedoras reciben las prestaciones 'tarde y mal, y a muchas de ellas, incluso, se les deniega esta ayuda'. 'La sensación de las familias es de total abandono y de descontento', declaró.

Dejación de funciones

La segunda investigación se refiere a una posible dejación de funciones con respecto a los menores extranjeros en situación de riesgo o desamparo, y la tercera aborda la aplicación de la Ley del Menor que, según las primeras impresiones del Síndic, 'no se hace debidamente'.

Fuentes de la sindicatura explicaron que 'cada una de estas tres líneas tienen entidad suficiente para dedicar una atención especial'. No obstante, Bernardo del Rosal no descarta abrir nuevas líneas de investigación a medida que se conozcan los resultados. El objetivo de la institución es obtener los resultados en un plazo inferior a ocho meses, según señalaron.

La intervención de oficio del Síndic de Greuges ante lo que parece un 'inadecuado' ejercicio de la guarda de menores es sintomático ya que, según aseguraron las citadas fuentes, son contadas las ocasiones en las que la institución inicia una investigación a instancia propia.

Por su lado, fuentes de la Consejería de Bienestar Social rechazaron ayer las presuntas irregulares que se le imputan y que han motivado la intervención del Síndic de Greuges.

Según fuentes de la Generalitat, Bienestar Social realiza un seguimiento de los menores en régimen de acogida familiar mediante las asociaciones y entidades a las que se les ha delegado esta tarea. Reconocieron, sin embargo, 'tener problemas' en el pago de las prestaciones económicas dirigidas a las familias acogedoras pero, añadieron, 'este problema corresponde a la Consejería de Economía y Hacienda'. La Generalitat Valenciana ha destinado durante este año más de 110 millones de pesetas para los órganos locales y ONG encargadas de los seguimientos.

Respecto a la actuación en materia de menores inmigrantes, fuentes de Bienestar Social aseguraron que 'reciben la misma protección que los nacionales', y apuntaron que 430 menores extranjeros fueron acogidos en centros residenciales y 119, en acogimiento familiar.

Estas fuentes rechazaron de plano que no hayan medios para la adecuada aplicación de la Ley del Menor.

Un grupo de menores reunido en el patio de un centro de Godella, en una imagen de archivo.
Un grupo de menores reunido en el patio de un centro de Godella, en una imagen de archivo.SANTIAGO CARREGUÍ

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