En octubre se alcanzó la cifra de 57.000 extranjeros en la Seguridad Social

Durante el mes de octubre, la cifra de afiliados extranjeros a la Seguridad Social en la Comunidad alcanzó los 57.066 trabajadores, según señaló ayer el secretario de Estado Gerardo Camps en Valencia. Camps, que asistió a los VII Encuentros Internacionales sobre Solidaridad y Servicios, apuntó que de ellos, 19.755 provienen de países comunitarios y 37.291 de terceros países. De ellos, la mayor parte se encuentra en Alicante. Hasta 28.989 se han afiliado en esta provincia, por 19.320 en la de Valencia y 8.757 en Castellón.

Camps también señaló que las tres provincias valencianas se encontraron durante el mes pasado entre las 10 primeras de todo el Estado donde más creció la afiliación a la Seguridad Social. El secretario de Estado de la Seguridad Social apuntó que, durante el mes de octubre, Valencia fue la provincia española donde más creció la afiliación en términos absolutos, con 17.458 afiliados. Castellón, con 6.209 trabajadores se situó en quinto lugar y Alicante, con 2.188 altas fue la décima provincia donde más creció la afiliación.

Durante su intervención, en la que ofreció una conferencia bajo el título El futuro del Estado de bienestar, Camps afirmó que en el futuro los trabajadores podrán contar con un sistema de jubilación 'a la carta' que permita a los trabajadores decidir sobre su permanencia en el mercado laboral. El secretario de Estado destacó la importancia de facilitar la prolongación de la vida laboral de los trabajadores que lo deseen, un aspecto 'necesario' ya que el Estado 'no se puede permitir que los trabajadores abandonen tan pronto su participación activa en la economía', para lo que propuso la 'estimulación' de mecanismos que la faciliten.

Este tipo de iniciativas, sumado a la incorporación de la mujer al trabajo y la llegada de extranjeros, permitirán garantizar el actual sistema de pensiones más allá de 2015, señaló. El envejecimiento de la población, junto a la transformación del concepto tradicional de familia, las nuevas formas de exclusión social derivadas del actual desarrollo económico y mantener los niveles de crecimiento económicos son los retos a los que deberán adaptarse los próximos modelos de Seguridad Social, apuntó.