El PP renueva el acuerdo antitransfuguismo 'por coherencia' una semana después del pacto de Estepona

El debate sobre el transfuguismo político celebrado anoche en el Parlamento andaluz tuvo tintes surrealistas, extravagantes y pintorescos, aportados principalmente por el Partido Popular y el diputado de grupo mixto, Ricardo Chamorro. Los populares apoyaron 'por coherencia y como no podía ser menos' una proposición no de ley del PSOE, en la que se respalda el acuerdo nacional contra los tránsfugas, a pesar de que hace menos de una semana el PP rompió el acuerdo antiGIL y accedió a la alcaldía de Estepona (Málaga) con el apoyo de ex concejales del Grupo Independiente Liberal. 'Es una muestra gigantesca de cinismo', aseguró el socialista José Caballos.

Las sucesivas intervenciones de los diferentes portavoces parlamentarios fueron interrumpidas por los diputados de todos los bancos, hubo constantes llamadas al orden del presidente de Parlamento, Javier Torres Vela, y también se produjeron alusiones personales propias de taberna entre el PA y el grupo mixto, formado por ex andalucistas.

El caso ocurrido en Estepona, donde el PP rompió de súbito el acuerdo de gobierno con otras tres fuerzas democráticas para hacerse con la alcaldía con el apoyo de ex ediles del GIL, fue citado y lanzado como un reproche por todos los portavoces, menos por el del grupo popular, que ni siquiera argumentó las 'razones de índole local' que había llevado a sus concejales a quebrar el acuerdo cuatripartito.

En su intervención, Caballos repitió ante el pleno lo dicho apenas 48 horas antes en una conferencia de prensa: 'Estamos ante unos hechos gravísimos de un partido que no es democrático. El PP ampara, protege y fomenta la corrupción y ha violado flagrantemente los pactos antitransfuguismo y antiGIL'. También comparó a Javier Arenas con el ministro de la Restauración Romero Robles, conocido cacique que adjudicaba a su antojo los escaños, y reclamó a PP el regreso 'al redil democrático'.

'Vaya marrón', le dijeron desde los escaños del PSOE al diputado popular José Luis Rodríguez cuando llevaba apenas unos minutos en la tribuna para explicar su posición. 'Por coherencia y como no podía ser menos votaremos a favor y apoyaremos las enmiendas de IU y andalucista', proclamó. Rodríguez no intentó defender los cinco pactos de su partido en otros tantos ayuntamientos bien con tránsfugas o con concejales que concurrieron con la franquicia de las siglas del GIL y fue tirando de recortes de periódicos para relatar que hasta en tres ocasiones la cúpula del PP propuso reiterar en Andalucía el pacto contra los chaqueteros, y en todas ellas encontró el rechazo de los socialistas.

Incumplimientos

Rodríguez vino a decir que si ellos habían incumplido el pacto, los socialistas también y con este socorrido recurso del 'tú más y peor' acabó su intervención como si fuera el animador de un club de fútbol cuando facilita las alienaciones de jugadores a la hinchada, aunque le salieron 15 nombres: 'Purchena, Pechina, Cantoria, Vícar, Carboneras; las diputaciones de Huelva y Cádiz; Casares; Manilva, Vélez-Málaga, Tolox; Los Barrios, Rota, Chipiona y Sanlúcar. Entrenador: Manuel Chaves. ¡Alirón, alirón, PSOE campeón del transfuguismo'.

La Cámara vivió momentos de estupefacción ante la astracanada del diputado Rodríguez, quien calificó de 'estafa electoral' el pacto municipal de Granada, acusó al PSOE de ofrecer dinero para comprar concejales y le recordó que 'el PP todavía no ha ido a la puerta de la prisión a hacer numeritos'.

'Hay que tener un poco de ética en los debates y centrarlos en los hechos'. Y los hechos, según Caballos, reflejan que la alineación de pueblos voceada por Rodríguez 'es falsa' y que en los dos pueblos donde el PSOE se ha aliado con tránsfugas se les ha abierto expediente de expulsión. 'No todos somos iguales', proclamó.

Antonio Romero (IU) no se permitió en esta ocasión hacer bromas, aunque sí dio abundantes detalles biográficos del anteriormente citado Romero Robles, 'conocido como el pollo antequerano'. El portavoz de IU incidió en la diferencia entre el pacto antitransfuguismo y el acuerdo antiGIL y consideró que lo ocurrido en Estepona, donde el PP gobierna con ex concejales 'imputados en delitos urbanísticos', es 'muy grave'. Romero, que alabó la iniciativa del PSOE, recordó que 'hay poco tránsfuga en el interior y más en la costa'.

La proposición socialista, aprobada con tan sólo dos votos en contra del grupo mixto y que incorporó enmiendas de IU y PA, insta al Consejo de Gobierno a impulsar medidas legislativas o ejecutivas que impidan y penalicen las prácticas transfuguistas y a que reclame al gobierno la modificación de la ley Electoral general para limitar los plazos de la presentación de las mociones de censura, además de respaldar el acuerdo nacional contra los tránsfugas.