Los niños obesos ya presentan alteraciones en las arterias

Si no se pone remedio, la actual epidemia de obesidad infantil deparará, entre otras consecuencias negativas, una oleada de infartos de corazón y cerebrales cuando esos niños se hagan adultos. Hasta ahora, las razones por las que los niños obesos acaban desarrollando más enfermedades cardiovasculares no estaban del todo claras. Pero un estudio francés con niños muy obesos (su proporción entre la talla y la estatura era tres veces superior a la media) ha revelado la probable causa: los niños obesos ya presentan alteraciones en las arterias.

El estudio de Patrick Touninan, publicado en el último número de The Lancet, se realizó con 48 niños obesos y otros 27 de peso normal, para comparar los resultados de diversas pruebas arteriales. Las pruebas implicaban el examen de la arteria carótida (la principal arteria del cuello) con ultrasonidos, así como la reacción de la arteria del brazo a una breve obstrucción con un brazalete o a la administración de nitroglicerina (un vasodilatador) bajo la lengua.

Los resultados han demostrado que hay diferencias llamativas en varias de las medidas de salud arterial, como son la elasticidad de la pared arterial y la funcionalidad del endotelio (el revestimiento íntimo de las arterias).