Seis semanas sin tregua

No habrá un momento de respiro en la segunda ronda para el Deportivo, condenado a vivir, de aquí a marzo, seis semanas sin tregua, media docena de partidos que se presumen arduos y de mucho desgaste. Cualquiera de los cuatro equipos de su grupo está en condiciones de clasificarse. Y entre las plantillas de los rivales del Deportivo asoman algunos de los mejores futbolistas del continente: Henry, Thuram, Nedved, Bergkamp ... En A Coruña el sorteo dejó caras largas, aunque la confianza en las propias fuerzas sea, por el momento, casi ilimitada. 'Para hacer historia hay que derrotar a los mejores', sentenció el presidente del club, Augusto César Lendoiro.

- Juventus, apuesta por la tradición. Tras un año en barbecho, la vecchia signora ha apostado por una mezcla entre los valores tradicionales para el banquillo ( regresó Marcello Lippi, protagonista de la más reciente época dorada del club) y los revolucionarios para la plantilla (se fueron Zidane e Inzaghi y llegaron Buffon, Thuram, Nedved y Salas). La fórmula ha mejorado su rendimiento, pero, de momento, tampoco ha dado motivo para grandes festejos. La Juve pasó con holgura la primera fase, en un grupo bastante confortable, y en la Liga se mantiene en los primeros puestos con cierta discreción. En la primera línea y en la última es un equipo muy contundente, incluso aunque no pueda contar en el ataque con el chileno Marcelo Salas, lesionado. Thuram se va aparecer en las pesadillas de algún delantero del Deportivo, que ya de antemano confesaba que no quería ni cruzarse con el hercúleo defensa francés. Pero en el medio, a pesar del gran Nedved y del despliegue físico de Davids, impera la mediocridad. El Deportivo ya se midió el año pasado al Juventus. Ambos partidos acabaron en empate, pero el conjunto de Irureta dejó la sensación de que estaba por encima de su rival.

- Arsenal, el peso de los nombres.Desde hace tiempo, la imaginación de los aficionados se excita al repasar los nombres de su plantilla: Henry, Bergkamp, Kanu, Pires, Vieira, Wiltord, Seaman, Parlour ... Y, sin embargo, el afrancesado equipo de Londres, bajo la batuta de otro galo, Arsene Wenger, no ha podido librarse del estigma de conjunto volátil y quebradizo. En Europa, todo han sido fracasos, y en la Liga inglesa, sus esfuerzos económicos no han podido evitar que al Manchester le siga sobrando un mes para lograr el campeonato. Este año, las cosas no han cambiado en exceso. El Arsenal volvió a pasar la primera fase con ciertos apuros, y en la Premier League se mantiene entre los primeros sin más alardes que los necesarios. Persisten sus clásicos problemas defensivos, pese a la ruidosa incorporación de Sol Campbell, enseña del Tottenham, su gran rival. Fuera de casa roza el desastre (el Mallorca le derrotó claramente en Son Moix, en la primera fase), de ahí que en A Coruña se acogiese con alivio la noticia de que el Deportivo abrirá el fuego en Riazor ante los británicos. Pero nadie como el cuadro de Irureta ha probado la fortaleza del Arsenal en Highbury, donde los gallegos cayeron por un estrepitoso 5-1 hace dos años, en la copa de la UEFA.

- Bayer, el poderío físico. En teoría es el más débil de los cuatro, pero en la primera fase ya hizo sufrir al Barcelona. Tiene el clásico poderío físico de los alemanes y una defensa muy bien armada, con el internacional alemán Novotny, el brasileño Lucio y el argentino Placente. El ataque, con el veteranísimo Kirsten y el ex jugador del Tenerife Neuville, parece la línea más floja. Su suerte dependerá mucho de que el centrocampista Ballack, uno de los mejores futbolistas alemanes, levante el vuelo.