Horas bajas
La presion del incremento del riesgo país en Argentina y el temor a una devaluación de su moneda han resultado traumáticas para las grandes empresas españolas, que ya han comenzado a admitir un recorte de sus beneficios.
Puestos a recortar, el FMI anunció la revisión a la baja de sus expectativas de crecimiento del PIB en el año 2002 para España, que pasan a ser del 2,3%, seis décimas por debajo de las estimaciones del Gobierno.
También Japón anunciaba la posible contracción de su economía hasta el 0,9% o el 1,2% para el año fiscal que termina en marzo del año próximo y en Alemania, el vicepresidente del Bundesbank afirmaba que por ahora no hay recesión en la eurozona, aunque es muy posible que la economía alemana se haya estancado.
Con un ambiente así sólo faltaba que la bolsa estadounidense no diera las habituales muestras de firmeza para que todo se viniera abajo. Los ánimos han decaído en Estados Unidos ante la inutilidad del esfuerzo bélico y la bolsa lo reflejó con una caída de más del 2% en el índice Dow Jones poco después de la apertura.
La bolsa española, bastante tocada por las caídas de los grandes valores, aceleró en su descenso hasta ceder al final de la jornada el 1,70% en el índice de Madrid y el 2,08% en el Ibex 35.
En esos momentos, el ambiente se había enrarecido para todos los mercados y las caídas de más del 2% fueron normales. París bajó el 2,13%, Londres el 1,98%, Francfort perdía el 2,98% poco antes del cierre y Nueva York y Nasdaq superaban el 2% de caída a media tarde.
