El PP prevé un gesto inminente de Rato para aprobar con el PSOE la renovación de cargos

Las direcciones del PP y del PSOE confían en cerrar definitivamente esta misma semana el pacto que alcanzaron hace casi un mes para la renovación de 36 cargos institucionales. El partido mayoritario espera 'con algún fundamento' que en breve el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, haga un gesto de distensión que permita al PSOE bajar las espadas y votar las candidaturas acordadas con los populares.

La comisión consultiva de nombramientos del Congreso de los Diputados se reunió en la tarde de ayer y fijó para el próximo jueves, 25 de octubre, las sesiones para el examen parlamentario de los 14 candidatos impulsados por los partidos mayoritarios para esos órganos que deben ser refrendados por la Cámara baja.

El PP pretende que el pleno del Congreso ratifique esos nombramientos de 20 miembros del Consejo General del Poder Judicial, 12 consejeros del Tribunal de Cuentas y cuatro vacantes del Tribunal Constitucional el martes de la semana que viene. El PSOE asumiría ese acuerdo si antes el vicepresidente segundo, Rodrigo Rato, facilita algún gesto público que se pueda entender como una rectificación de su afirmación, en un debate parlamentario, en el que calificó de 'chantaje' esa negociación porque el PSOE le exigía a cambio nombrar a un amigo de José Luis Rodríguez Zapatero para la Comisión Nacional de la Energía. El PP prevé que Rato pueda realizar ese gesto hoy.

El secretario general de los populares, Javier Arenas, preguntado ayer sobre esta polémica al término del Comité Ejecutivo Nacional del partido, al que también asistió Rato, expresó su deseo y convicción de que esta negociación tan envenenada pueda resolverse 'pronto y cuanto antes'. No quiso ir más lejos, precisamente para no enturbiar los contactos reanudados entre ambos secretarios generales este fin de semana con motivo de las elecciones gallegas.

Fuentes de la dirección del PP avanzaron su previsión de que Rato pronuncie en público algún tipo de frase conciliadora con el PSOE entre hoy y mañana para que el jueves puedan producirse las audiencias parlamentarias de todos los candidatos ya con el beneplácito de los dos partidos. Fuentes cercanas a Rato apuntaron que el vicepresidente no rectificará en público sus duras expresiones en un debate parlamentario con el portavoz del PSOE, Jesús Caldera, sobre el 'chantaje' que, a su juicio, Zapatero mantuvo al supeditar el acuerdo a la colocación de 'un amigo'. Estos interlocutores dan por supuesto que no habrá una rectificación en toda regla, pero si el reconocimiento del vicepresidente de que con sus palabras no quiso ofender a nadie y mucho menos herir la dignidad de la nueva dirección socialista.

Efectivamente, de dignidad habló ayer el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero. Este dirigente confió en que pueda producirse el acuerdo 'en breve', porque ya ha pasado demasiado tiempo y quizá si las cosas siguen así habría que empezar desde el principio. 'Pero no quiero poner ningún plazo porque no deseo que suene a ultimátum, ya que yo quiero el acuerdo'.

'Si se hace un acuerdo tiene que ser sobre las bases de la buena fe recíproca y de la verdad', dijo Zapatero tras la reunión de su ejecutiva. 'La verdad es que en la negociación que ha habido con el PP no se dieron ninguno de esos componentes negativos [chantaje y chalaneo] que el vicepresidente en su día expresó en el Parlamento, por lo que se trata de restituir el honor y la verdad sobre el contenido de ese pacto', explicó el líder socialista.

El PP, en cualquier caso, forzará el jueves en el Congreso la aprobación de los aspirantes, como hizo la semana pasada con los que les correspondió proponer al Senado.