The Cranberries edita un nuevo disco relajante y optimista

Un disco 'muy relajante'. Así lo califica Dolores Mary O'Riordan, cantante y líder de The Cranberries. Según ella es un trabajo tranquilo, pese a haber sido concebido tras disensiones internas por la enorme presión que trajo el éxito multitudinario de la banda y que tuvo su reflejo en la enfermedad de la cantante hace años: 'Da esa impresión de relax quizá porque lo hemos hecho en una de las situaciones más confortables de nuestra vida'.

'Estábamos muy a gusto con nuestra piel, con la banda, con nuestras vidas, con nuestras familias. Era un gran momento para que cada uno pudiera encarar su propia vida. Supone un nuevo principio en todos nosotros', asegura la cantante del grupo, formado por Noel Hogan, guitarrista, Michael Hogan, bajista y Fergal Lawler, batería.

Efectivamente, las canciones de Wake up and smell the coffee, publicado tras dos años sin grabar, destilan una determinación optimista, quizá cimentada en las sólidas familias que cada uno de los componentes ha ido formando en los últimos años. De hecho, en el transcurso de la grabación del disco nacieron el segundo hijo de Dolores y el primero del guitarrista Noel. Además, la banda, que ha regresado a vivir a su Limerick natal, en Irlanda, volvió a grabar en Dublín, y de la mano del productor Stephen Street, artífice de discos de éxito de The Smiths o Blur y productor de las primeras grabaciones de Cranberries. Para el batería Fergal Lawler, esa atmósfera de paz que despide el disco 'puede que haya sido cosa de Stephen y de cómo él encaró las grabaciones. Particularmente pienso que es una buena manera. Nosotros nos divertimos y el resultado ha sido fantástico'.

También Dolores destaca la labor de su producción y su cuidado: 'Pensé que hacer este disco iba a ser muy duro, porque estaba embarazada de mi hijo y tenía miedo de pasar demasiado tiempo en el estudio y despreocuparme de mi estado. Pero Stephen me hizo comprender que era importante que viniera al estudio a cantar un rato y luego me marchase a casa a cuidarme'.

Con el marchamo de personalidad que la voz de Dolores otorga al grupo, The Cranberries tocan en el disco temas como el eterno y delicado equilibro entre la mente y el corazón en canciones como Never grow old o Analyse, estrenada en la pasada gira del cuarteto. Según O'Riordan, 'hay algo en el ser humano que hace que estemos siempre preocupándonos y teniendo miedo por lo que va a suceder. Perdemos demasiado tiempo haciendo eso. En este disco decimos que hay que disfrutar el momento en el que se está'.

Y más en los tiempos que corren. The Cranberries, que interrumpió su gira europea de promoción en señal de duelo por los atentados terroristas en EE UU, dan este mensaje acerca de aquellos sucesos: 'Tenemos la mente abierta porque somos libres. No vivimos en prisión, ni somos víctimas de ninguna opresión: eso es lo mejor que podemos tener'. Del mismo modo manifiestan su desacuerdo con la reciente prohibición de determinadas canciones por parte de la Administración norteamericana, por considerarlas inconvenientes en el momento presente, como expresa Fergal: 'Es una pena que ocurran estas cosas en una situación así. Pensar que una canción puede ser mala me parece una tontería. Una canción no es más que una canción: puro entretenimiento'.