Abogados especializados atenderán a mujeres maltratadas

Las mujeres maltratadas contarán a partir de hoy con un turno de oficio especializado en Córdoba. Unos 270 letrados prestarán asistencia jurídica a las víctimas de la violencia de género, que podrán contar con el mismo abogado del principio al fin, en todas las causas que emprendan. José María Muriel, decano del Colegio de Abogados de Córdoba, declaró ayer que 'un verdadero clamor popular' pedía que la atención a las mujeres maltratadas se estructurase bien.

Muriel destacó que para responder a esta demanda con todas las garantías se ha organizado el primer curso específico sobre violencia de género destinado a los letrados. La realización del curso intensivo que se impartió ayer era requisito indispensable para acceder al turno de oficio, y seguirá siéndolo en los años sucesivos. 'Los abogados', explicó Muriel, 'tendrán que reciclarse permanentemente, y para ello se propondrán mesas redondas y otras actividades'.

Una de las ventajas básicas de este nuevo sistema, que según dijo Julio Coca, director general de Cooperación con la Justicia de la Junta, sólo se da en Andalucía, es que las afectadas por los malos tratos recibirán una asistencia unitaria e integral, es decir, que un solo letrado les proporcionará toda la atención jurídica que necesiten. De esta manera, en el período de tiempo que transcurra entre la denuncia de las primeras agresiones y la sentencia de divorcio, estas mujeres evitarán la necesidad de recurrir a los servicios de cuatro o cinco abogados diferentes, como sucedía antes.

'Hay que concienciar a la población', advirtió Muriel, 'de que el letrado del turno de oficio no es, en absoluto, un inexperto recién salido de la facultad que va a atenderles peor que los demás'. Al contrario, señaló, se trata de profesionales con experiencia y conocimientos más que suficientes. Y no sólo para los casos de violencia de género se requiere una formación específica, anunció. También es así para los menores, la vigilancia penitenciaria y los inmigrantes.

Coca y Muriel estuvieron de acuerdo en que los malos tratos a mujeres, sean físicos o psíquicos, no constituyen en ningún caso un problema personal o familiar, sino un fenómeno social, y por eso es necesario que las administraciones se impliquen e impulsen políticas activas para combatirlo. Recordaron, además, que hay casi dos millones de mujeres maltratadas en España y que cada año mueren, por esta causa, cerca de un centenar de ellas.

En la organización de este curso, que fue impartido por cuatro profesores (dos magistrados, José María Magaña y Rosario Flores; un fiscal, Juan Antonio Merlos; y un médico forense, Rafael García-Ferrer), participó, junto con la Delegación de Justicia y el Colegio de Abogados de Córdoba, el Instituto Andaluz de la Mujer.