ELA expulsa del sindicato a Bittor Lekuona, su secretario de Organización hasta julio
ELA ha dado de baja como afiliado del sindicato a quien fue hasta el mes de julio su secretario de Organización, Bittor Lekuona, según han confirmado responsables de la central. El expediente de expulsión ha sido ratificado por los órganos de la federación y la organización comarcal a las que estaba adscrito y tuvo su origen en las actuaciones realizadas por Lekuona (Oiartzun, 1953) con posterioridad a su salida de la dirección, y que ELA consideró desleales y lesivas para el sindicato. Antes de acordarse su expulsión, varios miembros del comité de ELA-Metal de la comarca de Oarso-Bidasoa, que Lekuona dirigió durante varios años, solicitaron por escrito a los órganos de dirección la paralización del expediente y la búsqueda de una salida no traumática.
El sindicato mayoritario ha pretendido llevar lo más discretamente posible la destitución de secretario de Organización, que había sido elegido el pasado mes de diembre en el X congreso. Sin embargo, las iniciativas realizadas por Lekuona en el seno de ELA para tratar de explicar la causa de su forzada dimisión del comité ejecutivo hicieron aflorar el conflicto y le han llevado a la postre fuera del sindicato. El ex secretario de Organización perdió la confianza de sus compañeros de la dirección tras intervenir en un área ajena a su responsabilidad y ocultar la gestión tanto a la ejecutiva como a la federación concernida. Consistió en un viaje realizado en junio a Estocolmo junto a representantes sindicales de ELA de la empresa TESA, de la que era trabajador en excedencia, para interesarse por el futuro de la compañía cerrajera, adquirida por la forma sueca Assa Abloy.
Según fuentes de la dirección, Lekuona asumió su 'grave error' y se pactó su dimisión como responsable de Organización 'por motivos personales', que presentó y le fue aceptada el 9 de julio. Semanas más tarde se reincorporó a la empresa TESA de Irún, en la que tenía excedencia. Posteriormente, sin embargo, remitió una carta a todos los miembros liberados de ELA, así como a otros sectores del sindicato, en la que, aun asumiendo la 'errónea actuación' del viaje a Estocolmo, argumenta que éste fue sólo el pretexto para forzar su salida del comité ejecutivo que encabeza José Elorrieta. Por contra, critica distintos aspectos del funcionamiento del sindicato, singularmente el 'verticalismo' en la toma de decisiones y la 'concentración de poder' en manos de algunos miembros de la dirección, que no identifica.
El envío de la carta y la celebración de reuniones con miembros del sindicato en Guipúzcoa sobre los que mantenía una fuerte ascendencia, en los que reiteró las acusaciones a la dirección, motivó la apertura del expediente de expulsión. Responsables de ELA, entre ellos el secretario del Metal, José María Larrañaga, han mantenido también numerosas reuniones con afiliados para contrarrestar la inquietud creada por el este conflicto, inhabitual en el sindicato.
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