El edificio del Sepu de Barcelona volverá a tener uso comercial
Parte de la terraza será de acceso público desde La Rambla
El antiguo edificio del Sepu, en La Rambla de Barcelona, volverá a destinarse a uso comercial y también se instalará en él un restaurante, según informó ayer la concejal del distrito de Ciutat Vella, Katy Carreras. Aunque los propietarios todavía no han presentado el proyecto definitivo al Ayuntamiento de Barcelona, sí se sabe que la terraza que antes ocupaban los jardínes del Palau Moja será, en parte, pública y se podrá acceder a ella directamente desde La Rambla.
Los almacenes de la Sociedad Española de Precios Únicos (Sepu) se cerraron en el otoño del año pasado y desde entonces se ha especulado sobre cuál sería su destino, teniendo en cuenta lo privilegiado de su situación y el hecho de que La Rambla se está saturando de comercios de souvenis y un tipo de oferta de restauración que contribuye a empobrecer su imagen.
El edificio, de 2.000 metros cuadrados, era propiedad del marqués de Comillas y arquitectónicamente formaba parte del Palau Moja, situado al lado, que actualmente acoge oficinas de la Generalitat. El Sepu lo ocupaba desde 1936 y desde su cierre la baraja de hipotéticos usos ha ido desde hotel a un nuevo centro comercial. El grupo municipal de IC-V en el Ayuntamiento de Barcelona propuso que se iniciaran negociaciones entre el marqués de Comillas y la Generalitat para recuperar el antiguo uso de jardín y volver a unificar el conjunto.
La concejal del distrito desveló ayer que serán dos operadores de sendos comercios los que ocuparán la planta y el sótano del edificio, y en la primera planta se instalará un restaurante 'de calidad', según precisaron fuentes municipales. Parte de la terraza será pública, de manera que se podrá acceder a ese mirador de forma directa desde La Rambla.
Dibujantes y pintores
La concejal Carreras tambien explicó ayer que el distrito ha realizado el sorteo para otorgar espacios a los dibujantes y pintores de La Rambla que tendrá un total de 50 espacios y 80 personas autorizadas, entre pintores, retratistas, caricaricaturistas, artistas que realizan su obra con aerosol y calígrafos chinos.
La regidora, que ayer presentó el programa de las fiestas del Roser, también se refirió a otros problemas relacionados con la ocupación del espacio público de La Rambla y de los comercios. Explicó, por ejemplo, que los agentes de la Guardia Urbana realizaron 723 actuaciones contra los trileros entre los meses de enero y agosto de este año, lo que representa una media de 100 por mes.
La policía local también intervino en 2.673 ocasiones por venta ambulante de tabaco. Carreras también informó de las inspecciones efectuadas en las múltiples tiendas de recuerdos que incumplen la normativa sobre exhibición de productos y carecen de puertas de cristal.
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