Ripoll confía en destinar el 2% del PIB de 2006 a investigación

El vicepresidente segundo, José Joaquín Ripoll, aseguró ayer en las Cortes Valencianas que el Consell tiene como objetivo lograr que en 2006 se destine el 2% del Producto Interior Bruto de la Comunidad a investigación, desarrollo e innovación. Ripoll indicó que un 1% debería corresponder al sector público y el otro 1% al privado. El vicepresidente anunció un incremento del 30% en la cuantía de las becas de investigación y la decisión de que cada consejería destine un 5% de su presupuesto a I+D.

Ripoll, que compareció en el pleno de las Cortes a petición de Esquerra Unida, no estableció fecha alguna, aunque dijo que 'muy pronto' el Consell aprobará el Plan Valenciano de Investigación destinado a mejorar las condiciones de los jóvenes investigadores. Según el responsable del Gobierno valenciano, el plan recogerá la elaboración de un estatuto del investigador, la creación de un mapa valenciano de investigación, desarrollo e innovación (I+D+I), las medidas para incentivar la cantidad y calidad de las investigaciones y las nuevas formas contractuales que evitarán que se eternice la figura del becario.

Ripoll indicó que la figura del becario debe tener una duración limitada y conseguir que luego se integre en la carrera investigadora. En este marco, el vicepresidente segundo dijo que se incrementarán los convenios con los institutos tecnológicos para que los becarios puedan mejorar su condición al tercer año. Una fórmula que podría pasar, según Ripoll, por la contratación de los becarios en la Oficina de Ciencia y Tecnología y su posterior incorporación como investigadores a los institutos tecnológicos.

El diputado socialista Eduardo de Vicente criticó al Consell por menospreciar la propuesta de pacto en materia de I+D realizada por el secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, y tachó de 'esfuerzo raquítico' la política del gobierno valenciano en esta materia. Por su parte, el portavoz de Esquerra Unida, Joan Ribó, señaló que el modelo de I+D en la Comunidad Valenciana tiene 'connotaciones tercermundistas, con mucha precariedad y bajos salarios sin un mínimo de condiciones laborales'.

En la misma sesión parlamentaria, el consejero de Bienestar Social, Rafael Blasco, defendió las actuaciones llevadas a cabo por las Administraciones del PP para resolver el problema de las drogas en la ciudad de Valencia. Blasco, que no se escatimó elogios, aseguró que no se trata de un problema local y afirmó: 'Los vecinos de estos barrios han tenido la sabiduría política de elegir a sus representantes para ayudarles a resolver sus problemas con una clarividencia enorme'. El consejero acusó a los socialistas de hacer 'demagogia barata que no tiene ningún tipo de credibilidad social'.

La oposición tachó de triunfalista y falta de coordinación la política del Partido Popular en materia de drogodependencias.