Once comunidades muestran su teatro en el festival de las autonomías

Cada vez más grande. La Muestra de Teatro de las Autonomías Villa de Madrid, que este año cumple su sexta edición desde que por primera vez la organizara el Círculo de Bellas Artes, y la tercera desde que colaborara en ella el Ayuntamiento, ofrece, desde hoy y hasta el 21 de octubre, 14 montajes de otras tantas compañías llegadas de 11 comunidades autónomas. Otros años solían acudir sólo nueve compañías de dos o tres comunidades, como recordó el director de la muestra, José Manuel Garrido.

La muestra sale además de su sede habitual, la sala Fernando de Rojas del Círculo de Bellas Artes, y no sólo porque uno de los montajes ocupa su sala de Columnas. El teatro del Centro Cultural Galileo, en Moncloa, acoge también varias de estas representaciones y se convierte así en un nuevo local público para la presentación de obras de teatro alternativo, como describió ayer, durante la presentación del festival, la primera teniente de alcalde, Mercedes de la Merced. A Madrid llegan compañías de Andalucía, Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Galicia, Extremadura, Murcia, Madrid y Valencia.

Hay asimismo una fuerte presencia femenina, con tres directoras y cuatro autoras entre los grupos participantes en esta muestra, que cuenta con el mismo presupuesto del último año: 25 millones de pesetas. Eso ha sido posible, como explicó De la Merced, porque las diferentes comunidades autónomas han pagado íntegramente el viaje y la estancia en Madrid, así como las tarifas, de sus respectivas compañías.

El festival comienza hoy con la versión en castellano de El lápiz del carpintero, sobre la obra homónima del escritor gallego Manuel Rivas, que estará hasta el día 27 en la sala Fernando de Rojas del Círculo. Lo lleva a escena la compañía Sarabela Teatro, fundada en 1980 en Ourense y dirigida por Ánxeles Cuña. Con esta obra, Sarabela acaparó, el pasado año, ocho de los 14 premios María Casares, otorgados por la Asociación de Actores, Directores y Técnicos de Escena de Galicia. Ocho actores representan en escena esta historia de amor que trasciende la memoria de la guerra.

Los siguientes en ocupar esta sala son los canarios de Delirium Teatro, con su personal adaptación de El Quijote. Estarán los días 29 y 30, este último de acceso libre por ser el Día de Puertas Abiertas del Círculo de Bellas Artes.

Los madrileños de Sintalento Teatro, una reciente compañía nacida del taller de Guindalera Escena Abierta, proponen un recorrido por las ambiciones y las traiciones en el despiadado sistema que rige el mercado con su obra La pecera, de Yolanda Dorado, que presentan los días 2 y 3 de octubre.

Shakespeare llega con su Sueño de una noche de verano de la mano del grupo murciano Alquibla Teatro (días 4 y 5). Los dos días siguientes son para otro grupo nuevo, como demuestra su nombre, Dramaturgia 2000, que llega de Valencia para ofrecer con Fuera de juego, de Toni Misó, una visión de las confusiones de los veinteañeros.

De Baleares viene (días 9 y 10) Teatre Educatiu, con otro Shakespeare, Romeo y Julieta, una 'historia de la juventud' dirigida por Gonzalo Baz. Los castellanos de Rayuela Producciones Teatrales representan (días 11 y 12) La controversia de Valladolid, dirigida por Nina Reglero, sobre el protector de los indios americanos Bartolomé de las Casas. Paloma Vaselle dirige al Centro Andaluz de Teatro con la obra de la joven Dámaris Matas Cuaderno de bitácora, premio Romeo Esteo 2000 (16, 17 y 18), y con Quince peldaños, de Gracia Morales, premio Marqués de Bradomín 2000, los tres días siguientes.

Además, la sala de Columnas recibe (días 13 y 14) a los madrileños Teatro del Astillero con Mingus/Cuernavaca (jazz poem), de Enzo Cormann y Jean Marc-Padovani.

La sala del Centro Cultural Galileo acoge por su parte las representaciones de la compañía Dante, de Madrid (26 y 27 de septiembre); Nun Tris, de Asturias (28 y 29); TPTC? Teatro, de Extremadura (3 y 4 de octubre), y Ábrego Producciones, de Cantabria (5, 6, y 7 de octubre).