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GENTE

EN FRIBURGO SIGUEN COMIÉNDOSE LOS GATOS

Parecía una historia del pasado, pero no. Es del presente. Según cuenta Jean Marie Rolle en las páginas del diario Le Matin, algunos suizos de Friburgo todavía se comen los gatos. 'Es más fino que el conejo... Es normal. Después de todo, el gato no se come cualquier cosa', contó uno de sus informantes, un hombre de 72 años, al periodista. Y hasta le confesó: 'Cuando éramos chicos, gatos de al menos cinco kilos figuraban en el menú de las grandes fiestas familiares, como en Navidad y el Año Nuevo'.

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