EE UU despliega cien aviones de combate en el golfo Pérsico Pakistán cede su espacio aéreo al Pentágono pese a las amenazas de los islamistas
La Operación Justicia Infinita, primera operación militar tras los atentados
La maquinaria militar de Estados Unidos ya está en marcha. El Pentágono ordenó ayer el despliegue de 100 aviones de combate en el golfo Pérsico, dentro de la llamada Operación Justicia Infinita, el primer movimiento militar de respuesta al ataque terrorista contra Washington y Nueva York del pasado 11 de septiembre. Los aviones, que despegarán hoy desde EE UU, son cazas F-15 y F-16, superbombarderos B-1 y aeronaves de vigilancia electrónica.
Los aviones se unirán a las fuerzas estadounidenses en el golfo Pérsico -dos portaaviones y 25.000 soldados-, además de los buques desplazados desde las bases militares en Asia. El comienzo de las operaciones contra posibles objetivos en Afganistán -donde se refugia el terrorista saudí Osama Bin Laden- coincide con la intensificación de las negociaciones que el presidente George W. Bush mantiene con sus aliados europeos, con Rusia y con los países árabes para poner en pie una coalición antiterrorista mundial. Bush dijo ayer que la movilización no tiene como objetivo una persona o una organización: 'Es una guerra contra los terroristas'. En Pakistán, país fronterizo con Afganistán, el general Pervez Musharraf justificó ante su pueblo la cesión de su espacio aéreo a EE UU.La maquinaria militar de Estados Unidos ya está en marcha. El Pentágono ordenó ayer el despliegue de 100 aviones de combate en el golfo Pérsico, dentro de la llamada Operación Justicia Infinita, el primer movimiento militar de respuesta al ataque terrorista contra Washington y Nueva York del pasado 11 de septiembre. Los aviones, que despegarán hoy desde EE UU, son cazas F-15 y F-16, superbombarderos B-1 y aeronaves de vigilancia electrónica.
Los aviones se unirán a las fuerzas estadounidenses en el golfo Pérsico -dos portaaviones y 25.000 soldados-, además de los buques desplazados desde las bases militares en Asia. El comienzo de las operaciones contra posibles objetivos en Afganistán -donde se refugia el terrorista saudí Osama Bin Laden- coincide con la intensificación de las negociaciones que el presidente George W. Bush mantiene con sus aliados europeos, con Rusia y con los países árabes para poner en pie una coalición antiterrorista mundial. Bush dijo ayer que la movilización no tiene como objetivo una persona o una organización: 'Es una guerra contra los terroristas'. En Pakistán, país fronterizo con Afganistán, el general Pervez Musharraf justificó ante su pueblo la cesión de su espacio aéreo a EE UU.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.