Una profesora denuncia a un colegio religioso concertado por discriminación
Manuela Martín dice que fue despedida por haber sido edil de IU
Manuela Martín Cano, ex profesora del colegio privado concertado Santa Teresa de Jesús de Huelva, acusó ayer a la dirección del centro de haberla despedido de manera 'injustificada', tras conocer que había sido concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Ayamonte. La profesora ha denunciado además 'maltrato psicológico' y 'mal ambiente' del equipo directivo hacia ella.Las responsables del Colegio Santa Teresa de Jesús, por su parte, se han negado a responder a las acusaciones.
En conferencia de prensa junto al coordinador de IU, Pedro Jiménez, y al edil de la coalición en Ayamonte, Antonio Miravent, Martín Cano explicó que en el curso 1999-2000 fue contratada por el colegio para impartir clases de Latín, al ser Licenciada en Filología Clásica. Asimismo, indicó que, posteriormente, debido a su currículum y a su labor profesional, el centro le amplió las horas de clase y las asignaturas. De este modo, durante los dos cursos en los que permaneció en el colegio se encargó también de Francés, Economía y Lengua Española en los niveles de ESO, Bachiller y COU.
La profesora aceptó además realizar un servicio en horario extraescolar, a cambio de lo cual el centro le permitía acceder gratis al comedor para no desplazarse hacia su localidad, Ayamonte.
Sin embargo, pocas semanas después, en noviembre de 2000, la coordinadora le comunicó la retirada del servicio. Al hablar con la directora, ésta le explicó que la delegada de personal se había enterado al asistir a una boda en Ayamonte de que la profesora despedida había sido concejal de IU.
La directora manifestó entonces, según la versión de Martín Cano, que con la decisión de quitarle la clase extraescolar el centro trataba de 'tranquilizar' la situación, porque la delegada de personal 'había llegado alarmada y alarmando', tras conocer su ideología de izquierdas. La afectada, no obstante, había dejado de trabajar en el Ayuntamiento en abril de 2000 por su dedicación a las tareas docentes.
A partir de entonces, Manuela Martín aseguró sufrir 'maltrato psicológico' por la pérdida continua de horas de clase y de asignaturas, hasta el punto de que dejó de dedicarse a Latín, así como el 'mal ambiente' del equipo directivo hacia ella.
De este modo, el pasado 6 de septiembre, Martín recibió una carta de despido en la que el Colegio restringió el contrato suscrito seis días antes. 'El motivo de nuestra decisión tiene su fundamento en que una vez analizado su perfil docente, consideramos que no reúne los requisitos exigidos para el puesto', agrega la misiva.
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