Crecimiento cero en 10 años

Los orientadores de los Equipos de Orientación Educativa de la provincia de Sevilla tenemos una ratio de 4-6 centros por orientador (en Sevilla capital la ratio es de tres). Esto supone que, como media, atendemos una población de 2.500 alumnos, con sus correspondientes aulas de apoyo (un orientador de un IES de tamaño medio atiende como media a 700-800 alumnos).

Como consecuencia, estamos desbordados de trabajo y de tanto priorizar quedan muchas necesidades sin atender. Se pretende que demos respuesta a todas las funciones del decreto de 12 de septiembre de 1995 (valoración de alumnos, entrevistas con padres, asesoramiento a profesores, aportaciones al plan de atención a la diversidad de los centros, programas a nivel de zona, prevención, informes por escrito, dictámenes, censo para la CEJA, coordinación con otros servicios, etcétera).

La necesidad de más tiempo de dedicación a los centros se viene reflejando en las memorias de los centros año tras año sin que la Administración educativa para nada las tenga en cuenta.

En los últimos años los profesores y los padres cada vez van siendo más conscientes de la necesidad de la orientación y demandan más nuestros servicios, no conformándose con atenciones puntuales. Hace unos años los equipos psicopedagógicos municipales eran un recurso más, pero paulatinamente han ido desapareciendo.

La consejería se preocupa de cumplir la Logse en lo que respecta a especialistas y así, para este año, se incrementan en 250 plazas de Música, 250 de Educación Física, etcétera, cuando ya existen uno o varios de estos especialistas en todos los centros y como consecuencia son varios los profesores que a la vez salen de sus tutorías para hacer tareas más o menos eficaces. Sin embargo, no cumple dicha ley en lo que respecta a la dotación de orientadores en Infantil y Primaria, ya que desde la convocatoria de 1990 el incremento es cero.

Nuestros gobernantes parece que no valoran el problema, puesto que si leemos los folletos que la consejería ha repartido por los centros, observamos que mientras se habla de mejorar la dotación de orientadores en Secundaria, para Infantil y Primaria se dice que se va a reestructurar la red para que haya mayor presencia y continuidad, ¿pero por qué no dice textualmente mejorar la dotación de orientadores?

Si la orientación psicopedagógica es un factor clave para mejorar la calidad de la enseñanza, muy poca competencia demuestran nuestros gobernantes si no son capaces de calcular que con muy poco presupuesto (por ejemplo que hubiera aumentado en 120 la red de orientadores en Andalucía en estos 10 años), la calidad y cantidad del servicio que prestamos hubiera mejorado bastante.

Y además se nos está privando de la posibilidad de movilidad al personal funcionario, lo cual es un atropello de un derecho recogido en nuestras leyes, ya que llevamos una década sin poder concursar.