Seis detenidos en el País Vasco por su relación con la red etarra en Álava

La Guardia Civil detuvo en la madrugada de ayer a cinco personas en Vitoria y a otra en Lekeitio (Vizcaya) por su presunta vinculación al entramado etarra en Álava. La operación, otro coletazo de la desarticulación del comando Barcelona, ha sido posible gracias a las declaraciones y a los documentos encontrados en la casa de Ramón Acedo, capturado la semana pasada en Palencia. Los detenidos ayer tenían información 'bastante elaborada' de militares y políticos, así como una nevera con doble fondo que los investigadores creen que iba a ser cargada con explosivos.

La operación, que fue puesta en marcha en las primeras horas de la madrugada de ayer, ha llevado a la detención en Vitoria de Iván Ortigosa Sáez de Jáuregui, Sendoa Domínguez Moreno, Raúl Vallinas Aduna, José Manuel Burgos Mendo y Juan Carlos Subijana Mendo, y a la captura en un cámping de Lekeitio de Aitor Durán Ruiz de Eguino.

Los seis han sido detenidos 'por su presunta pertenencia o colaboración con la organización terrorista', según el Ministerio del Interior, que cree que formaban parte de un grupo Y de ETA. Fuentes de la investigación han indicado que una séptima persona, presumiblemente un liberado (a sueldo) de ETA, de nombre Aitor, consiguió eludir el cerco policial.

Las declaraciones de los tres liberados de ETA detenidos en Barcelona el pasado 24 de agosto -Fernando García Jodrá, Nerea Bengoa Ciarsolo y Unai López de Ocáriz- han llevado a la Guardia Civil directamente hasta la provincia de Álava, de donde proceden los dos últimos citados. Desde entonces hasta ayer han sido detenidas 12 personas relacionadas con la infraestructura etarra en la provincia alavesa.

La detención más importante fue la de Ramón Acedo Espina -amigo y colaborador de López de Ocáriz-, quien estaba descansando junto a su padres en Fuentes de Nava (Palencia). Durante el registro de la casa de éste en Vitoria se localizó información elaborada sobre políticos del PP y sobre militares, especialmente sobre uno destinado en el cuartel de Araca (Vitoria).

La Guardia Civil registró ayer cuatro domicilios, en los que también se incautó de abundante información y otros efectos, sobre todo en la vivienda de Juan Carlos Subijana, Txampi, quien fue capturado cuando abandonaba el piso que ocupaba en el piso 2º C del número 2 de la calle Vicente Goikoetxea.

Fuentes próximas a la operación han asegurado que los agentes hallaron en dicha vivienda una nevera portátil con doble fondo y con un boquete que comunicaba con éste. Los investigadores están convencidos de que el refrigerador iba a ser cargado de explosivos y que a través del agujero se iba a introducir una mecha o un detonador. Las pesquisas han llevado a determinar que los detenidos, ninguno de los cuales estaba fichado, habían colaborado e informado al comando Ustargi -que actuó en Álava bajo la dirección de López de Ocáriz hasta agosto de 2000- y que actualmente estaba recabando datos para una eventual reconstitución de un grupo terrorista en la provincia.

Ayer fue puesta en libertad bajo fianza de un millón de pesetas Saoia Martelo, que había sido detenida en las operaciones previas a la de ayer. Martelo estaba en prisión incondicional desde el viernes pasado. La orden de libertad la dictó el juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo, quien estima que los datos que hay contra ella no son suficientes para mantenerla en prisión, además de que estimar que no existe riesgo de que se fugue.

Por otro lado, el titular del Juzgado central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, Guillermo Ruiz Polanco, notificó ayer al ex dirigente etarra José Luis Urrusolo Sistiaga los procesamientos por los secuestros del empresario Emiliano Revilla, en 1988, y de Diego Prado y Colón de Carvajal, cometido en 1983 -en ambos casos cuando el terrorista estaba encuadrado en el comando Madrid-, así como por la colocación de varios artefactos explosivos en diversas localidades turísticas españolas en 1991.