Josep Lluís Mateo lleva a Holanda su arquitectura integrada al entorno

El arquitecto Josep Lluís Mateo (Barcelona, 1949) ha ganado por unanimidad el concurso restringido de la nueva sede de la Diputación Provincial de Haarlem, en Holanda, donde pondrá en práctica su técnica de construir un edificio en un gran espacio integrándolo en el entorno. Mateo, arquitecto de gran seguimiento en el centro y el norte de Europa, sobre todo en Alemania, es también ganador del concurso del Edificio de Convenciones que se construirá con motivo de la reforma del frente litoral de Barcelona debido a la celebración en 2004 del Fòrum de les Cultures.

En su proyecto holandés, Mateo ha tenido que prever la restauración y la ampliación de dos edificios antiguos: un palacio burgués del siglo XVIII y una pequeña casita urbana, situados en el exterior del centro histórico en una zona de grande parques. Anteriormente, Mateo ya había trabajado en una área de interés histórico como es la intervención urbanística que realizó en Ullastret, población de la provincia de Girona donde se halla un importante poblado ibero.

El lema que ha encabezado el proyecto de la Diputación de Provincial de Haarlem ha sido Arquitectura y naturaleza: enterrarse o morir, que define de manera más amplia toda su obra, en la que Mateo intenta siempre que el impacto volumétrico en los espacios exteriores sea el menor posible y siempre en consonancia con unas ciertas reglas de proporción con el entorno. Para ello, aprovecha las posibilidades que ofrece trabajar por debajo del nivel de la tierra, aunque siempre busca soluciones que permiten la entrada de luz natural.

En este sentido, el arquitecto ha proyectado para la nueva sede del gobierno provincial una sala de reuniones subterránea, que a la vez se utilizará como auditorio, que se iluminará naturalmente gracias a la creación de un lucernario. El proyecto ganador también prevé una intervención en la zona ajardinada que trata de seguir la lógica de la naturaleza con desniveles subterráneos y promontorios que intentan eliminar el contacto a ras de suelo. Esta configuración le ha permitido salvaguardar todos los árboles de la zona intervenida.

Para llevar a término el proyecto se realizará una inversión de 3.000 millones de pesetas (18,6 millones de euros). La nueva obra de oficinas acogerá a 250 funcionarios y 240 plazas de aparcamiento. El inicio de las obras está previsto para el año 2002 y se espera concluir en 2005. En el concurso, Mateo tuvo que competir con Erick van Egeraat, de Rotterdam; Claus en Kaan Architecten, de Amsterdam, y la agencia londinense de David Chipperfield.

La reflexión sobre la arquitectura, subrayando aspectos de tipo casi filosófico, y de respeto al entorno natural ha marcado el trabajo de Josep Lluís Mateo. Algunas de sus ideas se recogen en el libro Josep Lluís Mateo, 1992-1995. Ideas y edificios, prologado por el arquitecto suizo Kurt W. Foster.