Los inmigrantes aceptan la oferta de alojamiento realizada por el Ayuntamiento y la Generalitat
División entre el colectivo magrebí y el subsahariano por el alcance de sus demandas
La asamblea general convocada para ayer por la mañana se frustró cuando los subsaharianos decidieron cambiar este sistema por la formación de dos comités. De esta manera, les propusieron a los magrebíes elegir 12 delegados para evaluar, junto a la plataforma de apoyo, la oferta de alojamiento.
Pero las dudas del colectivo magrebí inundaban la iglesia San Josep, de L'Hospitalet. Después de cuatro horas de asamblea donde se planteaba la anhelada regularización, los magrebíes eligieron al comité para la reunión programada por la tarde en CC OO.
Los delegados de ambos colectivos expusieron a la Plataforma su visión de la oferta de alojamiento gestionada por Cáritas y Cruz Roja. En principio se veía con buenos ojos, aunque para los magrebíes quedaban algunos puntos por aclarar, como por ejemplo cuántas plazas ofrecía Cáritas, ya que la Cruz Roja había informado que, por su parte, tan sólo disponía de 80.
La oferta final presentada anteayer por las administraciones catalanas garantiza la confidencialidad de datos; la asistencia jurídica, la duración indeterminada del alojamiento y la posibilidad de que los inmigrantes retenidos en el centro de internamiento de La Verneda sean acogidos en los inmuebles, siempre y cuando un juez lo autorice.
El principal cuestionamiento del colectivo subsahariano se centró en las acciones que tomarán las 34 organizaciones de sindicatos, partidos políticos y ONG que integran la plataforma de apoyo a partir de la aceptación del alojamiento.
La problemática que viven desde hace ocho meses los subsaharianos se agrava día a día. Por esta razón, los inmigrantes africanos pidieron a la plataforma que trabajara organizadamente para alcanzar su regularización, petición que ninguno de los colectivos piensa declinar.
Los magrebíes expresaron la necesidad de tomar una postura de unidad entre ambos colectivos, ya que consideran que padecen la misma problemática, la de los papeles y reclaman que una comisión de juristas vele por su regularización.
