Un español intenta quemar su coche lleno de explosivos en Lourdes
Un ciudadano español de 73 años intentó ayer suicidarse incendiando el coche con el que había accedido al santuario de la Virgen de Lourdes, en un recinto que ocupaban en aquel momento unas 40.000 personas. Los hechos se produjeron por la mañana, cuando este español residente en el sur de Francia consiguió forzar los controles que protegen el espacio dedicado a la devoción de los peregrinos e irrumpio en él con su coche, al que prendió fuego estando dentro. La policía extrajo al presunto suicida del vehículo y apagó el fuego rápidamente.
Al margen de lo que puedan dictaminar los psiquiatras que ayer tarde interrogaban al protagonista del extraño incidente, lo que sorprendió fue descubrir dentro del coche tres botellas de butano con detonador, ocho cócteles mólotov, una carabina del calibre 22 con el cañón recortado, centenares de cartuchos y una caja de cartón repleta de clavos. Todos esos elementos hacen pensar que, perturbado o no, el suicida quería provocar una catástrofe con muchas víctimas. Según Yves Saint-Macary, fiscal de Tarbes y responsable judicial del caso, 'el hombre parece haber actuado por motivos estrictamente personales, sin implicaciones religiosas o políticas'. El fiscal no ha querido explicar cómo llegó a tales conclusiones, difíciles de aceptar un 15 de agosto y en un Lourdes rebosante de fieles.
