El Ararteko advierte al alcalde de Hondarribia de que no puede permitir un Alarde discriminatorio

La titular de la institución del Ararteko, Mertxe Agúndez, ha advertido al alcalde de Hondarribia, el peneuvista Borja Jáuregui, de que la ley le impide autorizar la celebración del Alarde tradicional, en el que las mujeres sólo pueden participar como cantineras. Con ese permiso, destaca la ararteko, estaría vulnerando los derechos fundamentales de aquellas mujeres que desean desfilar como soldados, en igualdad de condiciones con los hombres.

Ante la proximidad del Alarde de Hondarribia, que se celebra el 8 de septiembre, la asociación Joana Mugarrietakoa, defensora del desfile mixto, se ha dirigido un año más al Defensor del Pueblo vasco para que apoye sus derechos. Agúndez ha remitido un escrito a Jáuregui en el que recuerda que el alcalde lleva cinco años desoyendo las recomendaciones de la institución de mediar para que se desarrolle una fiesta no discriminatoria, avalada por diferentes resoluciones judiciales, entre ellas una sentencia del Tribunal Superior vasco.

Este año, la autorización del desfile no compete al Gobierno vasco, sino al Ayuntamiento, al no ser, según otro fallo del Superior, un caso que afecte al derecho de reunión, sino a la celebración de un espectáculo público. Agúndez destaca en su carta que, en virtud de dicho fallo, la autorización del Alarde sólo se puede dar cuando, a juicio de la Administración gubernativa competente, en este caso el consistorio, 'las características del evento no conculquen la legalidad vigente'. Y añade que se prohibirá el desfile cuando 'suponga o pueda suponer un trato vejatorio para las personas o conculquen los derechos fundamentales' de las mismas.

La titular del Ararteko subraya que la conclusión resulta 'evidente', y es que el Ayuntamiento de Hondarribia 'no puede conceder una autorización para un Alarde tradicional, esto es, que excluya a la mitad de la población' por ser mujeres. Agúndez insiste en que 'el que se ha dado en llamar Alarde tradicional ha sido unívoca y reiteradamente considerado discriminatorio por los tribunales'.

El pasado junio, la ararteko también recomendó al alcalde de Irún, el socialista Alberto Buen, que no concediera la autorización al Alarde tradicional, pero el primer edil hizo caso omiso.