Núria Espert presenta una 'Medea' débil y sexual

El personaje de Medea es como una vieja amiga para Núria Espert. Con 19 años se metió por vez primera en la piel de la protagonista femenina. 'Entonces la nota predominante de Medea era la sed vengativa. Más tarde descubrí la deslealtad de Jasón que el engaño amoroso lleva consigo. Y hoy en día veo sobre todo el enganche sexual', constató ayer la actriz catalana, que hoy representará la tragedia de Eurípides en el teatro romano de Sagunto a partir de las once de la noche, junto al actor valenciano José Sancho que representa a Jasón.

Las diversas facetas de Medea (vengativa, engañada o dependiente de Jasón) se acentúan según la versión de los distintos directores de la obra. En este caso, el montaje del griego Michel Cacoyannis subraya su debilidad y su dependencia sexual.

El texto de la obra del autor clásico Eurípides, que data del 431 antes de Cristo, adaptado para esta ocasión por Ramón Irigoyen, relata cómo Medea, locamente enamorada de Jasón, mata a los dos hijos que tienen en común para vengarse de él cuando éste la abandona para irse con la hija del rey de Corinto.

El argumento altamente trágico y dramático no ha perdido actualidad. Para el director escénico, Cacoyannis, el infanticidio recuerda a los artículos que pueden leerse en la prensa: 'Mujeres desesperadas que matan a sus propios hijos', constató. Sin embargo, el final, según Cacoyannis, es inesperado.

'Medea desaparece de las manos vengadoras de su marido', dijo el director, y añadió 'esto establece una absolución del crimen' cometido por ella. Cacoyannis agradeció a Núria Espert haberle abierto 'la puerta', porque nunca antes había dirigido la obra Medea en teatro, y señaló: 'Espero haber descubierto algunos aspectos sutiles'. Por su parte, José Sancho, también mostró su satisfacción por poder actuar como Jasón: 'Me siento mejor actor e incluso mejor persona', dijo. La pieza teatral se podrá ver en Sagunto también mañana y pasado, en el marco del festival Sagunt a Escena.