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Elkarri suma ya 50.000 apoyos para su conferencia de paz

Jonan Fernandez afirma que es un 'indicador de la temperatura social' en favor del diálogo

El País

La conferencia de paz que promueve el movimiento social por el diálogo Elkarri, ha conseguido en poco más de dos meses sumar más de 50.000 firmas de apoyo, más un 20% por encima de sus objetivos, que habían situado en 40.000 firmas. Elkarri considera que sus expectativas se han visto 'cumplidas y superadas', ya que el pasado mes de febrero se plantearon conseguir apoyo social a través de 3.000 colaboradores para lograr que 40.000 firmantes contribuyeran con mil pesetas cada uno a la celebración de esta conferencia.

Ésta no consistirá en un acontecimiento puntual, sino que se desarrollará a lo largo de seis meses, desde el próximo mes de octubre hasta marzo de 2002. La conferencia se plantea como un foro de debate de todas las ideas, y un punto de encuentro 'y no desencuentro' de todos los partidos políticos sin exclusiones.

A través de un comunicado, Elkarri apuntó ayer que las adhesiones logradas 'otorgan a la iniciativa fuerza y legitimación social'. Su portavoz, Jonan Fernandez declaró a la SER que esta respuesta es un 'indicador muy claro de la temperatura social' en favor de una iniciativa de diálogo como la conferencia de paz.

El movimiento social explica que, aunque las adhesiones no sean comparables con los votos que obtienen las fuerzas políticas, significan que personas de diferente tendencia política apoyan su iniciativa.

Irlanda

Elkarri también apunta en su comunicado que Irlanda sigue siendo una referencia para el País Vasco, pese a constatar que el caso vasco y el irlandés son diferentes. Para el movimiento, el proceso irlandés sirve de referencia para aprender en lo que se refiere a actitudes y metodologías productivas. 'Aquí los hechos dominantes son actos violentos como los registrados en Portugalete, Lizarra o Villaba y la ausencia de diálogos productivos', mientras que 'las noticias que llegan de Irlanda nos hablan de la superación de una nueva y grave crisis en el proceso', señala Elkarri.

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El País Vasco debería aprender de Irlanda, en opinión de Elkarri, de 'los compromisos unilaterales de distensión para la no violencia'.

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