'¡Éste es el coche!'

'¡Éste es!', gritó claramente en la noche uno de los encapuchados. Fue la señal para que sus compañeros lanzaran los cócteles mólotov contra el vehículo camuflado de la Ertzaintza, en el que viajaban los dos agentes hospitalizados. El grito lo pudo escuchar claramente Begoña, vecina de uno de los edificios de la plaza.

'Oí todo el festejo', relataba en la mañana de ayer. Según ella, eran 'un grupo hermoso, más de 20 encapuchados, chavales todos'. 'Primero tiraron un cóctel a la BBK y nos asomamos a la ventana. Vi venir un autobús y pensé, ya está, van a por él, pero no, lo dejaron pasar y me extrañó. Aquí estamos muy acostumbrados a ver quemar autobuses. Es que es una zona que tiene muchas vías de escape', explica.

Esta mujer ha presenciado mucha violencia, demasiada. 'Nos estamos deshumanizando. Ante hechos como éstos, al día siguiente la gente está como si no hubiera pasado nada'. Begoña asegura que la sucursal bancaria que más ataques ha sufrido es la del BBVA sita en la esquina opuesta a la de la BBK. Ayer, aquélla estaba decorada con pintadas de 'Gora ETA, PP-PSOE asesinos' y carteles en recuerdo de la etarra Olaia Castresana, muerta en Torrevieja el 24 de julio al estallarle su propia bomba.

Los hechos sucedieron 'muy rápidamente'. Tanto que cuando otra vecina se decidió a abrir su persiana 'ya había pasado todo'. 'Al vivir en un primero, siempre temo que me entre uno de esos artefactos por la ventana', confiesa esta última.

'Siempre hay un coche de la policía municipal aparcado en esta calle, porque el alcalde [Mikel Cabieces, del PSE] vive ahí, en General Castaños. En esa calle también vivía antes Carlos Iturgaiz', presidente del PP vasco, apunta Begoña.