Mucha marcha, Márquez
Al español le sorprendió tanto su quinto puesto como el hundimiento de Paquillo
Markov, campeón en Sevilla, sólo fue 15º en Sydney, a donde llegó apenas recuperado de las lesiones que le produjo un accidente automovilístico pocas semanas antes. Márquez, menos patriota,también podría reivindicar la escuela catalana. O sea, el trabajo de Marín o Llopart, antiguos marchadores que no cesan de crear cantera. Márquez practicaba el atletismo en la escuela Viladecans, cerca de Barcelona, cuando le detectaron para la marcha. Trabaja con Marín, junto a Vasco y Valentí Massana, el hombre de la generación anterior, siete años mayor, el marchador al que poco a poco le va pisando los récords. El último, el de los 30 kilómetros, marcha, por supuesto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.