Fallece un niño saharaui al caer a las aguas de un canal en Badajoz

Un niño saharahui de ocho años que pasaba el verano acogido por una familia fue hallado muerto ayer flotando en las aguas del Canal de Lobón, en el término municipal de Talavera la Real (Badajoz), donde vivía. Abbidin Bucharaya, representante del Pueblo Saharui en Extremadura, señaló que el chico salió de la casa por una ventana sobre las 10.30 "sin avisar a la madre de acogida", por lo que ella daba por hecho que se encontraba jugando en su habitación.

Al parecer, el chico estuvo deambulando por el pueblo hasta que, posiblemente, se acercó al canal, resbaló y al caer al agua se ahogó. Bucharaya señaló que, aunque se intentó reanimarlo mientras era trasladado al Hospital Infanta Cristina en Badajoz, ingresó cadáver. El representante del Pueblo Saharaui en Extremadura, que calificó el hecho de "desgraciado accidente", indicó que "forma parte de la vida", ya que en España todos los días ocurren accidentes y muertes violentas.

Bucharaya indicó que ya se están haciendo las gestiones para repatriar los restos del niño, que venía por primera vez a Extremadura dentro de esta campaña de acogida. En la tarde de ayer, el cadáver del pequeño se encontraba en el Infanta Cristina a la espera de que se le haga la autopsia.

Bucharaya añadió que la familia de acogida "está totalmente destrozada", ya que era la primera vez que se habían hecho cargo de uno de estos niños. En total, unos 600 niños saharauis, procedentes de los campos de refugiados de Tinduf, pasan las vacaciones de verano en Extremadura acogidos por familias extremeñas dentro del programa Vacaciones en Paz.

La muerte de este niño eleva a cinco el número de menores que se han ahogado en Extremadura en los dos últimos meses. La primera de estas muertes ocurrió el pasado 28 de mayo, cuando un joven de 15 años, de nacionalidad marroquí, falleció en el río Tiétar a su paso por la localidad de Talayuela mientras se bañaba junto con otros jóvenes también marroquíes. Posteriormente, el 10 de junio, dos niños de 14 años de la localidad pacense de Fuente del Arco murieron ahogados mientras se bañaban en una charca situada en la finca El Pencón, próxima a esa población. El último accidente, hasta el de ayer, ocurrió el pasado 3 de julio, cuando un muchacho de 14 años falleció tras sufrir una parada cardiorrespiratoria cuando se bañaba en la piscina municipal de la localidad pacense de La Coronada.