Por una educación pública
Durante los últimos años, se ha producido un deterioro progresivo en la calidad de la enseñanza pública a causa de la poca preocupación que pone el Gobierno autonómico y la desviación de dinero público a las entidades educativas privadas.
La educación forma parte del desarrollo de una persona y por tanto es esencial que todo el mundo pueda gozar de una enseñanza gratuita, en beneficio de la mayoría de la población; pero, no obstante, parece que las cosas no funcionen así ahora, porque se está gastando mucho dinero público en beneficio de las entidades privadas, cuando realmente no debería ser así. El dinero de todos los ciudadanos es para todos y se ha de hacer un uso responsable y adecuado a las necesidades del sistema educativo público. Por otra parte, no se ha conseguido la implantación definitiva de la LOGSE en todos los lugares, y las promesas de que la etapa secundaria se haría en centros destinados a tal fin, han sido en vano. Y encima de todo esto tenemos pueblos de las zonas del interior que no disponen de las infraestructuras adecuadas para hacer unas clases dignas y como cualquier persona se merece.
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