El PSOE nombrará una gestora en Sestao pero no sancionará a Marcos Merino

Marcos Merino y el también dirigente del PSE de Sestao Antonio González tienen abierto un expediente interno desde principios de año tras las acusaciones de haber impulsado una moción de censura contra su compañero de partido, el alcalde Segundo Calleja, con el resto de grupos municipales incluso EH. Aunque los dos implicados lo han negado siempre, el hecho fue comunicado oficialmente a través de una carta por la dirección vizcaína del PNV a la ejecutiva del PSE de este territorio y luego también fue confirmado por EH.

Merino es el secretario general del comité local socialista y la cabeza visible del sector que desde hace año y medio mantiene una dura pugna en Sestao contra el alcalde sobre la política municipal. El primer edil ha defendido un acuerdo con el PP -que finalmente se suscribió en enero- y el comité local apuesta por una entente con el PNV e IU.

La resolución del expediente disciplinario ha sufrido diversas demoras, debido a la personalidad de Marcos Merino, que llegó a ser el número dos de los socialistas vascos la pasada década cuando este partido estaba liderado por Ramón Jáuregui. Primero fueron las elecciones autonómicas de mayo pasado, cuando se llegó a un acuerdo tácito de parar las disputas internas en Sestao con el fin de no perjudicar al PSE en los comicios. Luego ha sido la reticencia del aparato del PSE vasco a que Marcos Merino recibiera una severa sanción.

La resolución de este expediente contrasta con otro abierto también en Sestao contra dos concejales encuadrados en el sector de Merino. Los ediles Txema Rodríguez y Pedro Pablo Sainz vieron como a finales de marzo se les abría un expediente y en mayo eran ya expulsados del partido tras abandonar el grupo municipal y encuadrarse en el mixto.

En el caso de Merino y Antonio González, la instrucción de su expediente, que ha sido realizada por dos militantes de Vizcaya, concluyó en mayo y sostenía que ambos impulsaron la moción de censura lo que es considerado una falta grave. La dirección en Madrid estaba decidida a expulsarles pero las presiones desde el aparato de Euskadi han cambiado la opinión inicial.

Petición no compartida

Fuentes de la dirección federal señalaron a este diario que la ejecutiva 'no es partidaria de ningún tipo de sanción a Merino'. Estos medios añadieron que las peticiones de las instructores del expediente sobre la existencia de una falta grave no son compartidas. 'En la dirección federal no se tiene esa apreciación'.

La resolución del expediente tendrá lugar en las próximas semanas y llevará aparejado el nombramiento de una gestora que se encargará del funcionamiento de los socialistas en Sestao, informaron los mismos medios. Ahora falta por dilucidar cómo y durante cuánto tiempo se mantendrá dicha gestora, un mecanismo que se utiliza para resolver transitoriamente las crisis internas.

Hace dos semanas, según revelaron fuentes socialistas, el secretario de Organización del PSE vasco, Javier Cruz, intentó celebrar una reunión con Marcos Merino y el alcalde Segundo Calleja para abordar la situación en Sestao pero no pudo celebrarse por la negativa del primer edil a acudir al encuentro. Ambos ya coincidieron a finales de mayo a Madrid a declarar ante la dirección federal por el expediente abierto a Merino.

La crisis interna en Sestao, la agrupación local vizcaína con más militantes, se agravó primero con las discrepancias con los dos concejales que luego serían expulsados y alcanzó su punto de mayor crispación con una denuncia de la agrupación local contra Calleja de pedir ayudas a empresarios para beneficio propio. Entonces, en abril, el comité local envió una carta a los militantes en la que vertía fuertes críticas a la dirección vizcaína, que ha respaldado al alcalde. Acusó a la ejecutiva de actuar de 'muro de contención' ante la gestión de Calleja, que presentara la crisis interna como la 'ambición personal' de Marcos Merino de 'querer ser el nuevo alcalde' y que considerara la disputa existente 'como una lucha de poder interno en Sestao'.

La misiva sugería que la solución a los problemas del PSE en Sestao requería otro alcalde y concluía que 'para conseguirlo necesitamos seguir contando con vuestro apoyo y colaboración'.