Interior admite que la delincuencia ha aumentado en un 4% en lo que va de año
El Cuerpo Nacional de Policía ha perdido 6.000 efectivos en los últimos 10 años
El aumento de la delincuencia ha sido especialmente palpable en las zonas rurales, bajo custodia de la Guardia Civil, aunque también ha habido un ligero repunte en las grandes ciudades, según fuentes de la Secretaría de Estado para la Seguridad. Pese a ello, España sigue a la cola de los países de la Unión Europea (UE) en cuanto a índices de criminalidad.
España tiene una tasa de 23,14 delitos por cada 1.000 habitantes, la penúltima de la UE, ya que sólo Irlanda tiene un índice menor. Sorprendentemente, el país con la mayor tasa de delitos por cada 1.000 habitantes es Suecia, con 131,29, seguida del Reino Unido (99,69), Dinamarca (93,33) y Bélgica (84,13%). Los países más pobres de la Únión son los que ocupan los puestos más bajos de la tabla.
El Ministerio del Interior había conseguido el año pasado un descenso de la delincuencia en las ciudades de más de 50.000 habitantes (bajo custodia del Cuerpo Nacional de Policía) de un 6,57%. No obstante, desde primeros de año la delincuencia se mantiene estable, con una ligerísima tendencia al alza. Sin embargo, en las ciudades de menos de 50.000 habitantes el aumento de los delitos sigue imparable. La delincuencia en las zonas bajo vigilancia de la Guardia Civil aumentó el año pasado un 6,6% y, en lo que va de 2001, ha crecido casi un 4%.
Y ello a pesar de que la Guardia Civil, con sus 73.000 efectivos, cubre las espaldas del 20% de la población española, mientras que el Cuerpo Nacional de Policía, con 47.604 efectivos, se encarga del 80% restante, según admiten fuentes de ambos cuerpos. El instituto armado ha mantenido casi intacta y constante su plantilla durante los últimos años, pero la policía ha sufrido una sangría de efectivos, de forma que España tiene hoy día menos policías que hace diez años.
Pocos y mayores El Cuerpo Nacional de Policía ha perdido desde 1990 casi 6.000 efectivos por fallecimientos, bajas y jubilaciones. La plantilla de la policía era hace diez años de 53.381 agentes, mientras que en la actualidad es de 47.605, de los que 33.200 tienen más de 41 años y casi 2.000 se dedican exclusivamente a tareas de escolta. No obstante, las previsiones apuntan a que a finales de este año se volverá a reducir hasta los 46.414. Esta caída ha puesto en riesgo los planes de renovación de la policía diseñados por su director general, Juan Cotino.
Tras más de una década en la que las ofertas de empleo público para policías ni siquiera cubrían las bajas y jubilaciones de agentes, la llegada al Ministerio del Interior del vicepresidente Mariano Rajoy ha llevado a la mayor convocatoria de empleo público de los últimos 15 años, con 3.200 plazas. La policía pretende que las próximas ofertas mantengan esta tendencia para que no se cumpla uno de sus peores augurios: que en 2004 la plantilla se precipite hasta los 41.000 policías.
220.000 millones Paralelamente a estos fenómenos, el negocio de las empresas de seguridad privada se ha disparado en los últimos años, según reconocen fuentes del sector y de la Asociación de Empresas de Seguridad (AES).
Las compañías dedicadas a la seguridad privada facturaron durante el año pasado 220.000 millones de pesetas, con un aumento del volumen de negocio de casi el 8%, lo que supone el mayor incremento de toda la Unión Europea.
El aumento ha sido especialmente significativo en el sector de la protección de domicilios particulares. El volumen de negocio se ha duplicado en tres años hasta llegar a los 10.000 millones de pesetas y las previsiones indican que seguirá creciendo a un ritmo de un 20% anual. De hecho, según las citadas fuentes del sector, actualmente se instalan cada año más de 120.000 dispositivos de protección y alarma en domicilios, la mayoría de los cuales se contratan por estas fechas, cuando los ciudadanos se disponen a salir de vacaciones y temen encontrarse con la casa limpia a su regreso.
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