La Alameda
El espacio público que durante los siglos XV y XVI fue llamado La Laguna, la conocida Alameda de Hércules, vive hoy día momentos de incertidumbre. Recibía aquel nombre porque en su origen fue un brazo de río que se inundaba durante las crecidas quedando anegado. Tras su desecación y conversión en paseo recibió aún numerosas inundaciones. Pero hoy algunos políticos parecen leer poca historia y desoír las críticas de sus conciudadanos: no es posible excavar para construir los cimientos de un aparcamiento subterráneo en la Alameda sin que los cimientos de las viviendas colindantes sufran serios desperfectos.
La cuestión es bastante evidente y está probada con las perforaciones que ya se hicieron para la truncada construcción del metro. No han sido pocas las veces que diferentes vecinos y entidades sociales han manifestado su descontento con estos planes, bien en consultas hechas por el propio Ayuntamiento, bien con la recogida y presentación de más de 4.000 firmas adversas.
El alcalde y concejales del Ayuntamiento de Sevilla deberían actuar más acorde con un planteamiento de responsabilidad y pericia como equipo de gobierno en lo que respecta a las actuaciones urbanísticas en la Alameda. Y con una actitud más atenta a las reivindicaciones vecinales como políticos progresistas que presumen ser. De no ser así pueden incurrir en graves y difícilmente subsanables responsabilidades, por no hablar del descontento ciudadano que generan sus 'lagunas' de participación en La Laguna.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.