El alcalde: 'Las celebraciones de fútbol, en el Bernabéu'

El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, del PP, aseguró ayer que el Ayuntamiento 'no toleró' ni 'tolerará nunca' que los jugadores del Real Madrid se subieran a la estatua de la Cibeles, como ocurrió el pasado sábado tras lograr el club el título de Liga 2000-2001. El regidor añadió que la acción de los futbolistas le 'pareció mal'. 'Eso que quede claro. Las celebraciones de Liga, que las hagan en el estadio [Santiago] Bernabéu', señaló.

'Estaba acordado entre el club, la Delegación del Gobierno y el Ayuntamiento que sólo se subiera a la Cibeles un jugador, y se subieron todos sin autorización y sin consentimiento', precisó Álvarez del Manzano.

El alcalde añadió que, a pesar de que los futbolistas se habían saltado el acuerdo, se consideró contraproducente actuar: 'Hubiera sido peor disolverlos'.

Según el regidor, la costumbre de celebrar en la calle, de forma multitudinaria, los éxitos deportivos 'es una costumbre absurda'.

Como consecuencia de la fiesta que 300.000 seguidores del Real Madrid organizaron el sábado se produjeron destrozos importantes en los jardines próximos a la Cibeles y en el paseo del Prado, valorados, según los técnicos municipales, en más de 6,6 millones de pesetas. Los directivos del Real Madrid se han comprometido a pagarlos

El informe elaborado por los técnicos municipales destaca que el 100% de las flores de las isletas de Banco y Correos se han perdido como consecuencia de la acción de los hinchas. Además, tres plátanos recién plantados en el paseo del Prado fueron 'desarraigados' por los madridistas, que también acabaron con el césped de la plaza de Santa Cruz.