Cebrián alerta contra el 'fundamentalismo democrático' de la derecha en España
Advierte de que la división de los partidos democráticos es un 'triunfo' del terrorismo de ETA
"El fundamentalismo democrático es una enfermedad de la democracia, pero también una amenaza para su continuidad", aseguró Cebrián en su conferencia El Fundamentalismo Democrático, pronunciada en el Club Siglo XXI y que fue presentada por el escritor mexicano Carlos Fuentes.
Un fundamentalista democrático, según Cebrián, es aquel gobernante que "confunde demasiadas veces, incluso sin saberlo, el medio con el fin". Aquel para quien "la democracia deja de ser un método de convivencia para convertirse en un objetivo supremo o ideal". Por eso, "aunque muchos no lo quieran reconocer, beben con pasmosa naturalidad en los orígenes sociales y psicológicos del fascismo".
En su conferencia y en el coloquio posterior, Cebrián destacó el arranque de la Transición: la dictadura acaba cuando Franco "muere en la cama". Eso, subrayó, "no es una casualidad" sino un elemento clave de la historia reciente, como también lo es "que hubo un golpe de Estado hace sólo 21 años". Y como "40 años de franquismo no pasan en balde, todos, unos y otros, tenemos pulsiones autoritarias", reflexionó al final del coloquio y en respuesta a una pregunta de Manuel Chaves, presidente andaluz. Chaves había preguntado si todos los partidos eran iguales en su respeto a la democracia. Cebrián le respondió que no, "pero todos nos parecemos un poco". El control para evitar los excesos lo pone la democracia como mecanismo de "difusión del poder".
En los últimos 25 años, esa democracia ha pasado por un primer periodo de "duda" en la que parte de sus protagonistas asumían su cualidad de "conversos"; otro de "democracia arrogante", en la que los gobernantes socialistas "no tenían de qué arrepentirse respecto a su pasado", y la actual en la que "la alianza entre determinados periodistas, un sector de la Justicia y una clase política en la persecución del poder consagran el "fundamentalismo democrático". Con él, la Constitución "amenaza con convertirse en un texto sagrado, pervirtiendo su condición de instrumento".
Elecciones vascas
Cebrián expuso en su conferencia cómo ha visto este avance del fundamentalismo democrático en las elecciones vascas: "Al declarar que ETA y PNV son en el fondo lo mismo, porque persiguen el mismo fin, la independencia de Euskadi, el fundamentalismo democrático puso al descubierto uno de los síntomas más preocupantes de su enfermiza comprensión de la política: la confusión entre medios y fines". El resultado ha sido "un reforzamiento del voto nacionalista, una fractura creciente entre los partidos democráticos y una manipulación del dolor de las víctimas". En el coloquio añadió que "la ruptura de los partidos democráticos en la lucha contra el terrorismo es una victoria formidable de ETA" de la que hay que ser "conscientes".
Asumió que una dificultad para asumir esa conclusión es la "gran incomunicación entre sectores de la sociedad española", donde "el sectarismo hace cada vez más difícil sentar en la misma mesa a gentes que piensan diferente". Cebrián recordó una conferencia pronunciada por Javier Solana, míster PESC, a la que no asistió ningún representante del Gobierno del PP. Ayer, asistieron, entre otros, los expresidentes Felipe González y Leopoldo Calvo Sotelo, el vicepresidente del BSCH, Ángel Corcóstegui, el ex presidente del Constitucional Álvaro Rodríguez Bereijo, el expresidente del CGPJ Pascual Sala y José Luis Leal, presidente de la Asociación Española de Banca. Ante ese auditorio, Cebrián elogió la "democracia de la duda", que gobernó la Transición, "porque parte de la base de que el mundo se edifica sobre preguntas y no sobre respuestas". Y las respuestas son en democracia "plurales", porque "en la pluralidad de las respuestas reside el privilegio y la fortaleza de las democracias".
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