2.000 personas protestan en contra de la prostitución en la Casa de Campo

Pitos y pancartas en contra del comercio del sexo. Unas 2.000 personas se manifestaron ayer en la Casa de Campo en protesta por el ejercicio de la prostitución y la presencia de menores meretrices que ofrecen sus servicios en el pulmón verde de Madrid. La marcha, que transcurrió sin incidentes por el interior del parque, volverá a repetirse el viernes próximo, según anunciaron los organizadores. Los manifestantes, en su mayoría vecinos de Batán y Alto de Extremadura, barrios colindantes al parque, llevan años reclamando una solución política al asunto. 'Las autoridades no han hecho nada para que dejemos de pisar preservativos cada vez que andamos por la Casa de Campo', afirmó Manuel Dorado, presidente de la Asociación de Vecinos de Batán. Para transmitir sus quejas a los políticos, los residentes afectados entregaron, el pasado 14 de marzo, 20.000 firmas en el Ayuntamiento y en otras instituciones.

María Tardón, concejal de Policía Municipal, prometió hace tres meses crear una comisión política, vecinal y social para tratar el asunto de la prostitución en el parque, pero, hasta ahora, el foro no ha sido convocado.Con la llegada del buen tiempo, la presencia de prostitutas, que los vecinos cifran en unas 1.000, se ha incrementado. Los fines de semana, los clientes que van en busca de meretrices colapsan el tráfico en la Casa de Campo y dejan el parque sembrado de preservativos.