Arzalluz dice que 'sectores de la Iglesia' hacen gestiones de paz

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, abogó ayer por establecer conversaciones discretas entre los partidos antes de llegar a una mesa de diálogo pública y apuntó, sin dar más detalles, que hay sectores de la Iglesia Católica que están 'trabajando' en segundo plano para propiciar el fin de la violencia en el País Vasco. Arzalluz hizo estas declaraciones en la concentración celebrada a mediodía, ante la sede de su partido en Bilbao, en repulsa por el asesinato de Santiago Oleaga.

Preguntado sobre la mesa de diálogo que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, plantea para después del verano, Arzalluz señaló que, a su juicio, estas iniciativas precisan una preparación previa de 'conversaciones por debajo de todos con todos, eso que se llama trabajo de cocina'. 'Creo mucho más', añadió, 'en esa labor soterrada, seria, sin protagonismos, que se tiene que dar para que luego se den mesas eficaces'. Aseguró Arzalluz que 'hay gente que está trabajando' de esa forma para propiciar la paz. 'Tengo conocimiento de que hay sectores de la Iglesia, e incluso no de aquí, que [lo] están intentando', señaló el líder peneuvista con su habitual tono insinuante, pero sin ofrecer mayores precisiones sobre la naturaleza de las gestiones que sugería. Acto seguido se refirió también al colectivo Elkarri como otra de las instancias que 'por oficio se dedican al trabajo de la mediación', y que 'no sólo hablan por encima sino también trabajan por debajo'. Arzalluz fue más preciso al señalar que 'una verdadera mesa de paz de todos, incluido EH, presupone que ETA deje las armas'.