Sharon rechaza la exigencia de Estados Unidos de poner fin a los asentamientos
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, rechazó ayer cualquier congelación de las colonias judías en los territorios palestinos, tal y como le ha exigido Estados Unidos al aceptar el informe Mitchell, que el lunes sentó las bases de una salida al grave conflicto en Oriente Próximo. El ultranacionalista Sharon solicitó en un mensaje dirigido a la nación el alto el fuego inmediato por parte de los palestinos, y ofreció a cambio el fin de los ataques israelíes. Sharon, sin embargo, no dijo nada sobre el freno a los asentamientos y, sólo en conferencia de prensa posterior a su mensaje, declaró: 'Los asentamientos son un proyecto vital nacional que el Gobierno continuará apoyando, de acuerdo con su programa'.
Más de 200.000 israelíes, el 8% de la población, viven en 145 asentamientos, según las cifras oficiales, aunque organismos de derechos humanos aseguran que se han construido ilegalmente otras 190 colonias que desafían diariamente a los vecinos palestinos.
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