Rajoy afirma que el PSE debe seguir en la oposición 'si es coherente'

Si el PSOE es 'coherente' con la política que ha llevado a cabo en los dos últimos años 'será un partido de la oposición' en el País Vasco. El vicepresidente primero del Ejecutivo, Mariano Rajoy, despachó con esta frase su postura frente a un eventual acuerdo de los socialistas vascos con los nacionalistas para gobernar Euskadi. A su juicio, ni al PP ni al PSOE se les puede pedir que den su apoyo a programas que son 'radicalmente diferentes de aquéllos que defendieron' de modo que si Juan José Ibarretxe plantease 'algo similar a Lizarra o su apuesta soberanista' populares y socialistas no podrían apoyarle porque sería 'traicionar a sus electores'.

Respecto a la postura de su partido ante la reunión de Jaime Mayor Oreja con Ibarretxe mañana jueves, Rajoy indicó que el PP espera a que el PNV 'clarifique' su estrategia de gobierno ante las declaraciones 'contradictorias' que han realizado, a su juicio, los dirigentes nacionalistas vascos.

El portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera, por su parte, recogió el emplazamiento realizado el lunes por el ex presidente Felipe González a todos los partidos para que ayuden a Ibarretxe a gobernar sin Euskal Herritarrok (EH). Caldera consideró que se trata de un 'objetivo de Estado de todos los demócratas' y emplazó al PP a alcanzar una 'plena identificación' con el PSOE a ese respecto.

El portavoz socialista no aclaró cuál será el voto de sus correligionarios vascos en la investidura y se limitó a señalar que su candidato a lehendakari, Nicolás Redondo Terreros, debe escuchar hoy las propuestas de Ibarretxe durante la ronda que el aspirante a la reelección lleva a cabo con el resto de partidos.

El 'disgusto' de González

A quien no gustaron las declaraciones de Felipe González el lunes en un homenaje al ex ministro socialista asesinado por ETA Ernest Lluch, fue a Rajoy, que tras haber espetado ese mismo día que el ex líder del PSOE 'no da la talla' como antiguo presidente del Gobierno de España, volvió ayer a arremeter contra él. Dijo que González se llevó 'el mayor disgusto de su vida' cuando dejó el Ejecutivo y contrapuso su actuación a la de Adolfo Suárez, 'un hombre con equilibrio y mesura' que como ex jefe del Gabinete, según Rajoy, hace 'aportaciones constructivas' en vez de estar 'en lo más duro de la crítica sin sentido'.

Rajoy se refería a las acusaciones vertidas por el ex presidente socialista contra José María Aznar por su 'falta de visión de Estado' y la utilización 'electoralista' del terrorismo por parte del PP.

El vicepresidente primero añadió que a él también le agradaría una mayor colaboración internacional en la lucha contra ETA, si bien aseguró que va 'mejorando con el tiempo' y es algo 'que uno se tiene que ir ganando'. Asimismo, concluyó que le gustaría una mayor eficacia suya 'como ministro del Interior'.