La mayoría de los tenderos de Bilbao La Vieja se quiere quedar pero pide ayudas

Los comerciantes y hosteleros de los barrios de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala quieren que sus negocios permanezcan en esta zona que, aunque es una de las más conflictivas y degradadas de la capital vizcaína, consideran idónea para sus actividades comerciales. Eso sí, demandan más y mayores subvenciones para emprender reformas en los locales y hacer inversiones para mejorarlos. Paradójicamente los más interesados en recibir ayudas a la mejora del tejido comercial y del sector servicios son quienes han hecho inversiones en los últimos tres años.

Estas son algunas de las conclusiones extraídas por Lan Ekintza, la entidad encargada la promoción económica y del empleo en el plan general para rehabilitar estos tres barrios, a raíz de un estudio que hace una detallada radiografía de la actividad comercial y de servicios en este área. El estudios también ha revelado que en la última década la mitad de los comercios y de los establecimientos de servicios han cerrado.

El plan de rehabilitación de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala 2000-2004 prevé subvenciones por un total de 2.500 millones de pesetas para revitalizar el comercio y fomentar el empleo. Estas ayudas las aportan anualmente y a partes iguales el Ayuntamiento de Bilbao, la Diputación de Vizcaya y el Gobierno vasco.

El apoyo a los negocios de la zona se materializará en subvenciones a la reforma o reubicación, la informatización, el aprendizaje del uso de nuevas tecnologías, el asesoramiento para mejorar la gestión empresarial y el apoyo para facilitar la sucesión generacional al frente de estas pequeñas empresas familiares.

El responsable de Lan Ekintza, Ricardo Barkala, explicó que los propietarios de los 113 comercios y los 110 establecimientos de servicios -básicamente bares, restaurantes y pensiones- de estos barrios son 'más tenderos que empresarios', según el estudio, de formación escasa para desempeñar esa tarea y poco dados a la promoción comercial. Explicó también que la mayoría de los negocios existentes están al cargo de personas que están en el último tramo de su vida laboral por lo que es especialmente necesario facilitar la sucesión para garantizar su permanencia.

Barkala anunció la creación de dos empresas que se dedicarán a la rehabilitación de locales hoy abandonados para abrir nuevos negocios.