La izquierda de Madrazo

Está claro que en estas, al margen de vencedores absolutos existe un evidente vencedor moral: Ezker Batua-Izquierda Unida y su coordinador general, Javier Madrazo. Resulta gratificante comprobar cómo por una vez, y espero que sí sirva de precedente, todos los despreciables intentos desde la más altas instancias políticas, mediáticas e intelectuales para desprestigiar a esta organización y sacarla del ámbito representativo han sido baldíos. Las urnas han hablado y han puesto a cada uno en su sitio, y a Ezker Batua con un umbral superior al 5 % (¿se acuerdan de este porcentaje y de todo lo que Madrazo tuvo que oír?).

Los resultado para esta fuerza política son excelentes. En primer lugar, por haber superado las previsiones nada halagüeñas que machaconamente los medios encargados de formar opinión se empeñaban en difundir. En segundo lugar porque ese crecimiento se produce en una fuerza neta y básicamente de izquierdas, a pesar de las dificultades que hoy en día presenta este espacio para hacer difundir sus propuestas. Y en tercer lugar porque al día siguiente de las elecciones la práctica totalidad de las fuerzas políticas ha recogido la necesidad de diálogo y sosiego que debe imperar a partir de ahora, es decir, exactamente lo que ha venido defendiendo Ezker Batua antes y durante la campaña.-