'A los que nos censuraron por ir a Cuba les decimos: 'Ve y míralo'
Galeses y combativos, el grupo Manic Street Preachers ha recorrido el camino del éxito durante la década de los noventa con una peculiar obra musical en la que se conjugan las leyes básicas del pop anglosajón con una fuerte ideología de izquierdas que, lejos de granjearles la antipatía o relegarles al ostracismo a causa del establishment capitalista, les ha proporcionado éxito masivo, reconocimiento por parte de la crítica, la industria y el público. Precisamente en esta actuación en español presentarán las canciones de su último disco, Know your enemy, que nació con polémica ya que la primera actuación del mismo tuvo lugar el pasado 17 de febrero en La Habana ante la atenta mirada de Fidel Castro, que hasta se animó a bailar.
'Hasta ahora, nuestros discos y actuaciones tenían un punto melancólico, y a pesar de eso, hemos tenido mucho éxito'
James Dean Bradfield, guitarrista y cantante del grupo, rememora aquella actuación como un cúmulo de 'emociones contradictorias. Honestamente, nosotros nos presentamos allí con una actitud expectante. Nuestra intención no era en modo alguno decir que la revolución es buena, aunque era inevitable aparecer junto a los símbolos de esa revolución o ser relacionados con la asistencia del presidente Castro. Pero hay cosas que te hacen pensar'.
Esas cosas se traducen en los detalles de una vida cotidiana en Cuba tremendamente peculiares: 'Nos llamaron la atención hechos como la ilusión con la que el equipo olímpico de natación cubano se entrenase en una pequeña piscina de hotel y, al mismo tiempo, intentasen vender las medallas para conseguir algo de dinero. Son esas cosas que normalmente no vemos en la MTV. Mucha gente puede tratar de censurarnos porque les parezca que prestamos nuestro apoyo a aquella situación. A esa gente le decimos: 'Ve allí y míralo con tus propios ojos'.
El disco recoge también una de las últimas polémicas, la del niño balsero que supuso una confrontación, una más, entre Estados Unidos y la nación cubana. Sin embargo, según Bradfield, con la canción Baby Elián, el grupo ha tratado de abstraer conclusiones a partir de la noticia concreta y puntual: 'No trata sobre un suceso o sobre Cuba, sino sobre la relación entre América y Cuba. No soy tan estúpido como para creer que la nación más poderosa del mundo va a dar su brazo a torcer sobre el asunto, pero sí tratamos de aportar un punto de vista distinto al que ofrece la CNN. No sólo existe el sentimiento de paranoia que los americanos tienen hacia Cuba. Hay otros puntos de vista'.
Know your enemy se despega en su factura de la última producción del grupo, en la que pesaba aún la extraña desaparición de su primer cantante, compositor y amigo de la infancia Richie James, aún en paradero desconocido: 'Hasta ahora nuestros discos y actuaciones tenían un punto melancólico y, a pesar de eso, hemos tenido mucho éxito. Puede ser que nuestras emociones acerca de Richie pesaran sobre nosotros'. No obstante, el trío sigue echando en falta a aquel miembro original de la banda: 'Es muy extraño. Creo que echamos de menos a Richie en muchos niveles diferentes. Le echamos mucho de menos en lo personal. Éramos unos amigos desde niños que, un día, hicieron un grupo y creo que en estos días es eso lo que más notamos en falta: al amigo. Hubiéramos deseado tocar y estar en el estudio con él. Muchas veces decimos: 'Si hubiera estado aquí, seguro que le habría gustado esta canción'.
