Falso reportaje
Rodado en 28 días, en 16 milímetros, con la cámara en la mano, en la base militar de Starke, Florida, Tigerland es un falso documental que trata de imitar el peculiar estilo creado por el gran especialista Frederick Wiseman en sus mejores obras. Sin embargo, el resultado queda muy lejos del planteamiento, al ser una película más, y de las peores, sobre la guerra del Vietnam, con una fotografía tan mala que resulta difícil distinguir, unos de otros, a sus pocos conocidos actores.
Primero diseñador de vestuario y desde principios de los años ochenta director de irregulares películas comerciales, Joel Schumacher intenta cambiar de estilo con Tigerland, y lo consigue, pero para realizar uno de los peores trabajos de su poco atractiva filmografía.
TIGERLAND
Director: Joel Schumacher. Intérpretes: Colin Farrell, Matthew Davis, Shea Whigham, Clifton Collins, Russell Richardson. Género: Guerra. EE UU, 2000. Duración: 109 minutos.
Ambientada en 1971, en la base militar que da título a la película, lo más parecido a Vietnam que han encontrado en Estados Unidos, la acción transcurre durante las ocho semanas que dura el entrenamiento de un nuevo grupo de soldados que debe partir para la guerra. Bajo la mirada de un duro teniente, aparecen el soldado que quiere ser novelista, el que quiere demostrarse a sí mismo que es valiente, el que se resigna a lo inevitable, el que sueña con matar vietnamitas, a los que se une el protagonista, que hace cuanto puede para que sus compañeros regresen a su casa y no vayan a morir a Vietnam.
Planteada como el lanzamiento del irregular actor Colin Farrell, hasta bien entrada la película resulta difícil distinguirlo del resto de sus compañeros, Matthew Davis, Shea Whigham, Clifton Collins Jr. o Russell Richardson.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.