La Generalitat gastó 350.000 millones más de lo previsto en 1998, según la Sindicatura

La auditoría de las cuentas de la Generalitat de 1998 fue debatida ayer en el Parlament a puerta cerrada en comisión por los responsables de la Sindicatura de Cuentas y los diputados. La auditoría de la Generalitat ha vuelto a entrar en el Parlament con un retraso de más de un año respecto a lo que prevé la ley de la Sindicatura de Cuentas.

La auditoría entregada a la Cámara refleja que el Gobierno catalán logró cerrar el año con un déficit de 7.860 millones de pesetas, en línea con los objetivos fijados. Los ingresos finales fueron de 2,11 billones de pesetas, 344.754 millones por encima de lo previsto. Estos ingresos se lograron elevando la deuda emitida hasta 257.550 millones, tres veces y media más de lo previsto en el presupuesto inicial. El resto de ingresos adicionales provinieron de transferencias de la Administración central para gasto (75.000 millones), transferencias para inversión (59.000 millones) e impuestos (24.000 millones), según la liquidación auditada por la Sindicatura de Cuentas.

En el capítulo de gastos, los destinados a inversiones aumentaron en 82.871 millones y se produjo un aumento de 75.032 millones en los gastos de funcionamiento (salarios de funcionarios, compra de bienes y servicios y transfencias a otros organismos). La auditoría refleja que la Generalitat dejó de reconocer unos 1.300 millones de pesetas de gastos.

Al acabar 1998 el endeudamiento de la Generalitat ascendió a 1,033 billones de pesetas,frente a 880.000 millones el año anterior, según los datos de la auditoría.

La Sindicatura de Cuentas recoge en sus conclusiones algunas triquiñuelas utilizadas para cuadrar las cuentas con el déficit previsto. Los auditores afirman que 'se han liquidado derechos [ingresos] que están pendientes de cobro al final del ejercicio, y que corresponden a acuerdos o convenios con otras administraciones sin que éstas hayan reconocido la obligación [de pago] en el mismo ejercicio'.

Los auditores también piden información sobre 'los recursos y reclamaciones pendientes', con los cuales 'la información mejoraría considerablemente', señalan. La Sindicatura de Cuentas también plantea que se le informe sobre el volumen de 'derivados financieros' [opciones y futuros sobre productos financieros].