Un millón de metros cuadrados para industria en el distrito 22@

La transformación de la futura Barcelona no se comprende sin el distrito 22@, situado en el viejo Poblenou. Se trata de transformar una zona de industria del siglo XIX en la que dará vida a la ciudad a lo largo del siglo XXI. La nueva industria ya no es pesada, no contamina, no ahúma, no es ruidosa. Esto permite la convivencia con el sector terciario e incluso con una parte de viviendas.

El Ayuntamiento de Barcelona proyecta para el 22@ industrias vinculadas a las nuevas tecnologías y también universidades. Para ello dispone de un espacio de actuación de 1,9 millones de metros cuadrados, de los que 659.343 serán para calles y plazas. En estos momentos hay en la zona un total de 4.614 viviendas, algunas de ellas de legalidad discutible. Todas serán legalizadas y el resultado final será que habrá en la zona 5.600 viviendas.

La reestructuración de las viejas industrias permitirá ganar hasta 3.087.993 metros cuadrados de techo para actividades industriales, pero también 101.032 para zonas verdes y 168.318 para equipamientos.

En estos momentos trabajan en la zona unas 31.000 personas. El número final de puestos de trabajo oscilará entre 90.000 y 110.000. Las inversiones previstas no bajan de 26.500 millones de pesetas sólo en infraestructuras.

Las industrias recibirán directamente de la red agua caliente y fría, a temperaturas extremas, y conexión a la red de cable. De hecho, se prevé que en la zona se instalen todos los operadores de telecomunicaciones y se reservarán espacios para otros que puedan aparecer en el futuro.

Evitar las zanjas

Habrá también recogida neumática de basuras y todas las manzanas estarán dotadas de galerías de servicios por las que circularán los cables de luz y teléfono y las tuberías de agua y de gas. Estas galerías evitarán las populares (por conocidas y frecuentes) zanjas que hoy pueblan la ciudad.

El Ayuntamiento de Barcelona tiene prevista la construcción de tres pozos para aprovechar el agua de la capa freática, que ha ido subiendo en la zona al mismo compás al que cerraban las viejas industrias que la extraían.

La zona contará con 159 cruces señalizados, con semáforos regulados por control remoto, de forma que se pueda dar prioridad a los pasos a voluntad. La red de tranvías prevista es de 3,2 kilómetros, a lo largo del frente litoral.

La estructura urbanística mantendrá, en líneas generales, el diseño de calles lineal y las manzanas octogonales ideadas por Ildefons Cerdà para facilitar los giros, aunque los chaflanes no tendrán que estar ocupados por el reparto ya que se prevén diques de carga y descarga en el subsuelo de las nuevas construcciones.